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WINDSURF-JUEGOS OLIMPICOS DE RÍO 2016

Curro Manchón entrenará a su hermana Blanca hasta Río 2016

La windsurfista, tricampeona del mundo, tiene como objetivo competir en Río 2016. Para ello se ha unido a su hermano Curro, técnico de la subcampeona olímpica, la finesa Tuuli Petaja.

La windsurfista sevillana Blanca Manchón (Nike) empieza a definir su nuevo proyecto olímpico. Una vez pasada la cita de Londres 2012, el objetivo de la tricampeona mundial no es otro que competir en los JJ.OO. de Río 2016. Para ello ha decidido unir fuerzas con su hermano Curro, flamante subcampeón olímpico el pasado verano como técnico de la finlandesa Tuuli Petaja, que contra todo pronóstico se colgaba la medalla de plata en el campo de regatas de Weymouth & Portland.

Vista la progresión de la regatista nórdica, bronce en el Europeo 2012 de la clase RS:X, bajo las directrices del considerado recientemente mejor técnico de vela del año en Finlandia, triple campeón mundial en su etapa como regatista, en la que acumula otras cuatro medallas entre Europeos y Mundiales, además de una plata en los Juegos Mediterráneos, la menor de la saga hispalense no lo ha dudado para asociarse con su hermano. La meta: la cita brasileña de dentro de cuatro años.

La regatista del Club Náutico Sevilla, que en el pasado ciclo olímpico estuvo asesorada técnicamente por el catalán José Luis Piñana, quien en los Juegos de Londres dirigió a Rafa Trujillo, vuelve al calor familiar en busca de los resultados que la llevaron desde finales de 2010 hasta mediados del presente año a liderar el ranking internacional de la disciplina olímpica del windsurf.

No hay que olvidar que previamente, de la mano de su padre, Francisco Manchón, Blanca ya hiciera historia para la vela española al participar, con tan sólo 17 años en los Juegos de Atenas, donde logró un diploma olímpico (8ª), colgándose meses después su primera medalla de oro en un Campeonato del Mundo absoluto.

Para este nuevo proyecto olímpico que desembocará en Río 2016 , Curro Manchón, que ha desestimado una oferta de la Federación China, se centrará en exclusiva en su hermana Blanca. Eso sí, seguirá asesorando a la finlandesa Tuuli Petaja, con la que comenzará a trabajar solamente año y medio antes de la cita brasileña. De hecho, repitiendo el modelo empleado durante 2011 y 2012, ambas compartirán varios stage de entrenamientos junto con otras regatistas de primer nivel internacional, experiencia que ya realizaran tanto en El Puerto de Santa María como en aguas de Madeira, escenarios de los últimos Mundiales y Europeos de la disciplina olímpica del windsurf, la clase RS:X, ratificada para 2016.

Blanca, de 25 años, campeona del mundo de la clase Mistral (2002 y 2005) y RS:X (2010), campeona de Europa de Mistral (2005) y RS:X (2006) y elegida Mejor Regastista Mundial de 2010, ha señalado que "Este nuevo ciclo olímpico va a ser muy diferente a los otros. Desde hace mucho tiempo he querido trabajar con mi hermano. Ahora he aprendido mucho y me tomo esta nueva etapa con nuevos objetivos y otra mentalidad. Curro ha demostrado ser el mejor entrenador del mundo, ya que en sólo dos años ha llevado a la número 18 del mundo a conseguir una plata en los Juegos Olímpicos".

Curro Manchón, de 32 años. arquitecto de profesión y que compagina sus funciones como técnico con las de regatista y en cuyo palmarés figuran tres títulos Mundiales y otras cuatro medallas entre Europeos y Mundiales, ha indicado que: "He aceptado entrenar a Blanca porque creo que podemos hacer un viaje inolvidable, sea cual sea el resultado final. En el deporte siempre hay éxitos y derrotas, y se alternan. Es ley de vida. Con Tuuli lo hemos pasado mal, muy mal, bien y muy bien, pero al final lo que te queda es la experiencia".

"Desde que Blanca tiene 12 años, siempre he estado entrenándola parcialmente, alternándome con otros entrenadores y con mi padre. Nunca he podido dedicarme a entrenar porque tengo otras pasiones y he tenido otras prioridades en la vida, entre ellas, la arquitectura y mi propia carrera como deportista, ha revelado

Aún así, considera que: "Ahora, habiendo colmado con creces todas mis expectativas con esa medalla de plata olímpica, y las de ella, carecía de sentido seguir, ya que siempre lo más bonito de un proyecto es el camino hasta su consecución. Para mí es un honor que una deportista con su palmarés quiera que yo la entrene. La verdad que es un reto volver a llevarla a lo más alto del windsurf mundial. ¿Con quien mejor que con mi hermana para compartir una experiencia de campaña olímpica, disfrutar del camino y ver que nos depara el destino?

"Pero por el momento habrá que ser pacientes. Esto es una carrera de larga distancia y Blanca necesita recuperarse bien de la lesión en el hombro y Tuuli de la resaca de la medalla", finaliza el técnico.