La samba rusa se interpone en el camino de la Selección

Final anticipada, mejor partido de Europa, duelo entre viejos enemigos... Muchas son las calificaciones que recibe el España-Rusia de hoy en los cuartos del Mundial de Tailandia. Sin duda, el mejor encuentro de lo que llevamos de torneo con el aliciente de que uno de los candidatos al título se irá a casa y revancha de la final del Europeo de hace apenas nueve meses. Partidazo.

Y Rusia asusta. Cuatro encuentros jugados, cuatro ganados, 30 goles a favor y ninguno en contra. Todo guiado por los cinco brasileños nacionalizados (Pula, Lima, Robinho, Cirilo y Gustavo) que ejercen como estrellas, no obstante obra suya son 17 goles y 17 asistencias, aunque no son los únicos peligros. Shayakhmetov, Sergeev o Fukin intentarán vengarse de la final europea perdida ante España, incluso recurriendo a divinidades, como afirma Pereverzev: "Espero que Dios viera aquella final y esta vez nos ayude".

Sin embargo, en España no hay complejos. "Hemos venido a ser campeones del mundo y para ello hay que ganar todos los partidos. Nosotros debemos centrarnos en nuestro juego", comenta Fernandao, uno de los dos brasileños de nacimiento, junto a Alemao, con los que cuenta España. Si bien su peso es menos importante que en el rival (cuatro goles de los 22 españoles) ambos deben ser fundamentales. El derbi sudamericano Brasil-Argentina, el igualado Portugal-Italia y el Colombia-Ucrania completan las semifinales.