Anna Tarrés y Carpena no quieren firmar la paz

Acompañada de su abogado, Jorge García, Anna Tarrés apareció en la puerta de la Real Federación Española de Natación (RFEN) con un vestido blanco impoluto, el color de la inocencia. Casi dos horas después salía y declaraba que en ningún momento trataron el tema de la demanda que ha interpuesto contra Fernando Carpena, presidente de la RFEN. "No hemos llegado a ningún tipo de acuerdo, ni siquiera se ha tocado el asunto. Nadie ha pedido aclaraciones", declaró su abogado.

Cuesta creer que no se hablara de una cuestión tan grave en una reunión tan larga y con abogados de por medio, pues Carpena también estuvo acompañado de la asesora jurídica de la RFEN, además de Eugenio Bermúdez, gerente de la Federación.

Herméticos. Pero, efectivamente, no se tocó. "He entregado el informe que se me ha solicitado sobre el funcionamiento del equipo", dijo Anna Tarrés. "Era un informe rutinario", corroboró después Carpena. "La reunión se ha desarrollado de forma educada". Dentro de estas manifestaciones herméticas, ni una palabra sobre la demanda. "Deberíamos dejarlo aquí", dijo el abogado de Tarrés ante la insistencia de los periodistas. "Va a haber un juicio y una sentencia. No adelantemos acontecimientos".

Lo que sí se trató en la reu­nión, aunque Tarrés eludió hablar del asunto, fue de la carta de las quince nadadoras que le acusaban de maltrato y vejaciones. La Federación le pidió su opinión sobre ella y le preguntó si anteriormente había recibido personalmente alguna otra carta de nadadoras. Tarrés dijo que no.

Hasta 2013. Ambas partes confirmaron que, pese a su anunciada destitución y de la polémica que se ha levantado, Anna Tarrés seguirá siendo la directora técnica de la natación sincronizada hasta que termine su contrato el 31 de diciembre de este año. Curiosamente, tras recibir el informe de Tarrés sobre la actuación del equipo en los Juegos de Londres, la RFEN le ha pedido otro en el que exprese su opinión sobre cómo enfocar el próximo período olímpico.

"No he hablado con ninguna chica (de las que firmaron la carta), ni pienso hacerlo", fue una de las pocas declaraciones de Anna Tarrés. Fue más su abogado quien habló por ella.

Y Carpena tampoco quiso hablar de la querella que le ha interpuesto Jesús González, exgerente de la RFEN, por fraude y apropiación indebida. "No tengo ni idea del asunto", dijo.