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Boxeo | Actualidad

Adiós a Stevenson, el púgil que rechazó a Ali

Teófilo Stevenson, considerado el mejor púgil amateur de siempre, falleció en La Habana con 60 años. Sólo él, el húngaro Laszlo Papp y su sucesor Félix Savón consiguieron tres oros olímpicos. El 'castrista' Stevenson no quiso entrar en el boxeo de pago, donde le esperaban Ali, Frazier o Foreman.

Adiós a Stevenson, el púgil que rechazó a Ali
pepe andrés

Teófilo Stevenson se marchó de este mundo, con 60 años y tras sufrir una cardiopatía isquémica, y nos dejó sin ver esa pelea soñada contra Cassius Clay. Tres veces campeón olímpico de los pesados (Múnich 1972, Montreal 1976 y Moscú 1980), récord que comparte con el húngaro Laszlo Papp y su sucesor Félix Savón, y tres veces campeón mundial, no le volvió la cara a la Revolución Cubana. "Soy fidelista por convicción", decía. Y una frase, que pertenece a la historia del boxeo, del deporte y de la política, le retrató: "¿Qué es un millón de dólares comparado con el cariño de ocho millones de cubanos?".

Stevenson, el Gigante de Delicias (1,90 m y 105 kg), se refería a las ofertas que tuvo para pasarse al profesionalismo, prohibido en la Isla. La intención era cruzarle con los grandes pesos de la época: Ali, Frazier y Foreman. La primera tentación llegó tras el oro de Múnich, que ganó con su tremendo puño derecho fracturado: el famoso millón de dólares. Primer no.

Don King.

Luego llegó el segundo: a Don King, que pidió ayuda al dictador Omar Torrijos. El tercero se lo dio a Bob Arum -quien guía los pasos de Pacquiao-, que utilizó de intermediario al promotor jamaicano Lucien Chen. Sí se cerró una exhibición a tres asaltos con Ali, con la bolsa del cubano para fines sociales, pero la desbarató el Departamento del Tesoro de EE UU por el embargo a Cuba.

Nunca se sabrá lo que hubiera sido capaz de hacer Stevenson en el boxeo de pago. Pero los profesionales le reverenciaron. El propio Ali fue a visitarle dos veces a La Habana, donde en la Finca de los Monos instruía a futuros medallistas. "Un combate entre Ali y yo hubiera acabado en tablas", sentenció. Se fue sin dejarnos comprobarlo.