Juanín acaba con el Huesca

Estaba claro que el Huesca, antepenúltimo en la tabla y luchando por la permanencia, iba a salir al Palau a plantarle cara al líder porque ''su liga'' es otra diferente. Quizás por ello su técnico José Francisco Nolasco no alineó de salida a seis de los siete hombres que si lo hicieron el pasado viernes en la victoria ante el Granollers (31-26).

Con una defensa clara en ''seis-cero'' rotando al pivote Víctor Tremps y al lateral zurdo argentino Matias Vieyra en ataque y al pivote Raúl Bartolomé junto a Marco Mira en defensa.. También Xavi Pascual daba descanso de salida a varios de sus titulares. Ya había descartado a Oneto, Ugalde y Jernemyr en la convocatoria y rotó a Viran Morros en la transición defensa-ataque, dejando a Shiarhei Rutenka inédito en el banquillo.

El conjunto oscense plantó cara durante los primeros quince minutos (7-7) con el serbio Milos Pesic como mejor baza ofensiva. A partir de ese momento el técnico local Xavi Pascual empezaba sus rotaciones dando entrada a Jesper Noddesbo, Raúl Entrerríos y Laszlo Nagy y llegaba un primer parcial de 4-0 (11-7, m. 21).

El ritmo del encuentro se aceleró y las acciones por los extremos de Juanín Garcia y Albert Rocas, además de los ''cañonazos'' de Mikel Aguirrezabalaga, acababan con la tímida resistencia visitante y de un apretado 13-11 (m.26) y tras dos postes de los visitantes, se llegaba al descanso con la máxima ventaja local hasta el momento (16-11).

Abrir brecha

En la segunda mitad, Víctor Tomás relevaba a Rocas en el extremo derecha azulgrana y el meta esloveno Vlaz Voncina relevaba a Julio Rodríguez en la meta oscense. El juego barcelonista empezó a ser más rápido. Juanin Garcia y Tomás superaban por velocidad a la defensa rival y Mikel Aguirrezabalaga junto a Igropulo superaban el eje central de la cobertura con lanzamientos desde nueve metros.

En el Huesca, sólo Pesic plantaba cara y el Barcelona abría brecha (29-20, m.48) y el técnico visitante pedía tiempo para frenar la efectividad local, pero también su ataque perdía fuerza ante un Johan Sjostrand muy centrado (10 paradas en el segundo tiempo) y los azulgrana lograban su máxima ventaja a cinco minutos para el final (34-23) y el encuentro entró en una fase ya más tranquila y equilibrada hasta el final.