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Gales: un triunfo para inaugurar la nueva era
Busca la revancha ante Francia
Dos pulgadas. A esa distancia se quedó Gales de la final del Mundial de Nueva Zelanda. Los dragones, que jugaron en inferioridad media semifinal, aguantaron el pulso a Francia y pudieron batirla con una patada de Halfpeny que se quedó a dos pulgadas. Esta generación de jóvenes está condenado a dominar el hemisferio Norte como lo hicieron en los años 70 los legendarios Barry John, Gareth Edwards, Mervyn Davies, Phil Bennet, JPR Williams, JJ Williams, John Dawes, John Taylor... En su país ya se compara a Jamie Roberts, Priestland, George North, Jonathan Davies, Warburton o Faletau con aquellos mitos que lograron en la 'Década Roja' ocho títulos del V Naciones y tres Grand Slams. Esta nueva Gales puede arrancar su 'Década Roja' ganando título y Grand Slam. Debe doblegar a una Francia que ha convertido el champagne en gaseosa. Seleccionador nuevo, despliegue caótico, ningún medio solvente y sin libreto de juego.
Después, Irlanda se plantará en Londres el día de San Patricio ("ganar en París es un placer, hacerlo en Londres es un deber"). Pretende arruinar el final a Stuart Lancaster, seleccionador interino inglés que trata de ganarse el contrato, y a Inglaterra sus opciones de título (debe enjugar un average de -38 respecto a Gales). Y en Roma, Italia-Escocia con la cuchara de madera en juego.