Golf | Masters de Augusta
Schwartzel se corona, pero Tiger sigue vivo
El sudafricano batió a los australianos Day y Scott.
El último día del Masters de Augusta podría considerarse el peor de la vida golfística del niño McIlroy (se fue con +8 a casa) y el de la resurrección de Tiger Woods (-5, ayer). El Tigre mostró sus uñas, su rabia acumulada, e hizo un golf de escándalo (genial con el driver y de tee a green) que le podría haber dado su quinta chaqueta verde de no ser porque estuvo fallón con el approach y en algunos putts cortos (12 y 15) y porque le faltaron hoyos... Tiger, cabreado, pagó el lastre de sus malos primer y tercer días y fue cuarto.
Carrera.
La última jornada del Masters tuvo a Tiger (con 67, hizo su mejor última vuelta en el torneo), pero también a una carrera de resistencia que protagonizaron casi una decena de hombres (Donald, Choi, Ogilvy, Van Pelt, Cabrera...). Se la llevó el sudafricano Charl Schwartzel, el verdadero hombre del día, que le robó la cartera a dos australianos: Adam Scott, que juega con putter escoba, y Day, rookie en Augusta. Schwartzel (-14), un jugador sobrio, de 26 años, que disputa el Circuito Europeo, es el tercer sudafricano que gana en el National tras Gary Player e Immelman. Terminó a lo campeón, con un birdie en el 18 y -6 al final del día (cuatro bajo par en los cuatro hoyos finales). Mejor que Tiger y que todos sus persistentes rivales, Schwartzel ganó el primer major de su vida.
De los españoles ni rastro. Quirós y Jiménez terminaron en el puesto 27º (-1) y Sergio cayó al 35º en el día que Tiger resucitó, McIlroy lloró y Schwartzel siguió la estela de Gary Player, aquel miembro del Big Three.
Kaymer sigue número uno
El alemán Martin Kaymer no pasó el corte y vio como su número uno del mundo se tambaleaba. Pero ni McDowell, ni Mickelson, ni Westwood, ni Donald desafiaron su corona en todo el fin de semana. Sólo Tiger lo intentó, pero ya era demasiado tarde. Y así... Kaymer retendrá su liderato una semana más. Será la séptima.