El Valladolid sorprende al campeón en su debut

Debutaba Tristán en el Deportivo, sin duda alguna, uno de los mejores jugadores que ha aportado el fútbol español a la Liga profesional y que ahora podemos disfrutar desde otro marco, pero eso es lo de menos. El sevillano acaba de dejar la práctica profesional del fútbol y tras una llamada de Fran, el delantero, pichichi en el año 2002, no dudó en dar el si.

Pues allí estaba Diego, con un pabellón O Burgo de Culleredo lleno hasta la bandera para presenciar en directo a su Depor, que se enfrentaba al Real Valladolid, que debutaba en la competición y eran sabedores, de antemano, de las dificultades con las que se iban a encontrar. Pero tampoco iban a renunciar a nada. Con jugadores como Alberto, Isailovic o el propio Turiel, los pucelanos iban a aprender de este deporte, sí, pero también a obtener un resultado positivo ante un equipo que lleva dominando la competición un año completo, sin conocer la derrota en los últimos once encuentros.

Todo hacía presagiar un encuentro cómodo para el vigente campeón de liga y copa. El Deportivo abrió el marcador en el minuto 2 en una jugada personal de Javier Manjarín ante un Valladolid que no se dejó amedrentar por la veteranía de su oponente en esta modalidad deportiva. Los de Donato marcaron la intensidad inicial del partido, pero los pucelanos salieron muy bien plantados tanto en defensa como en ataque. El Valladolid no solo no pecó de novato manteniendo la portería defendida por Rodri bien resguardada, sino que llevó la iniciativa en la parcela ofensiva y poco a poco también en el partido.

La igualdad en el marcador se mantuvo hasta casi el ecuador de la primera parte gracias a los tantos de Isailovic, Alberto y Santi Cuesta, que neutralizaron un explosivo arranque de Manjarín, el único que aguantó de su equipo en ese tramo de encuentro. Con el 3-3 en el electrónico, el Deportivo recuperó la iniciativa en el juego hasta que en el minuto 20 se rompían las tablas con el 3-4 anotado por Javi Torres. Y aunque José Ramón volvía a empatar el partido rápidamente, los pucelanos mantuvieron su buen hacer y volvieron ponerse por delante con un espectacular gol de falta de Macón. No ayudó a un Dépor tan insistente como impreciso de cara a portería el gol en propia puerta que anotaba Fran cuando restaban 5 minutos para el final de la primera mitad. Un lejano disparo del propio capitán del Dépor, desviado por Manuel, ponía el 5-6.

El Valladolid se marchó de este modo con la ventaja de un gol al descanso después de haber demostrado una excelente preparación para esta nueva aventura en el fútbol indoor. En la segunda parte, los visitantes mantuvieron el mismo papel que en la primera mitad del encuentro. Esperar atrás bien parapetados y salir rápidamente a la contra les funcionó a la perfección para encarrilar el choque, abriendo una brecha de tres tantos en el marcador con dos goles de Isailovic y uno de Alberto.

Diego Tristán, una de las incorporaciones del Deportivo en esta temporada, y César recortaron distancias hasta el 6-9, pero el Valladolid seguía llevando el ritmo del encuentro en todos los sentidos. Alberto volvió a aumentar la ventaja del Valladolid hasta el 7-9, pero un penalti anotado por Fran y un tanto de Manuel devolvía la igualdad con el 9-9 en el electrónico y las esperanzas a una afición volcada con su equipo. El Dépor parecía volver a enchufarse al partido y se ponía por segunda vez por delante en el marcador con un tanto de Manuel a diez minutos del final, pero fue solo un espejismo.

Minutos antes, el Valladolid perdía a uno de sus hombres más inspirados en ataque, Isailovic, con tres goles en su cuenta particular hasta el momento. La protesta de una decisión arbitral le hacía ver la segunda amarilla. A pesar de este contratiempo y de tener enfrente a un Dépor más acertado que en la primera mitad, el Valladolid se mantuvo bien plantado sobre la moqueta y volvió a igualar el partido gracias a un gol de Pereira que ponía el 10-10 en el electrónico. De este modo, empezaba la cuenta atrás en el Pabellón de O Burgo para un anfitrión que no quería perder su segundo partido en cuatro años.

Pero no lo pudo evitar. Con el equipo blanquiazul volcado arriba, Alberto y Pereira aprovecharon el contraataque para, ya sobre la bocina, poner el resultado definitivo al partido. Un final que hizo justicia al desatino de un Deportivo que no puede permitirse otro tropiezo y a una carta de presentación de un Valladolid que demostró en A Coruña que hay que tenerlos muy en cuenta en esta liga Fertiberia de fútbol indoor.