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FÚTBOL INDOOR | BARCELONA 9-ESPANYOL 8

El Barcelona se lleva por la mínima el derbi del Indoor

Partido frenético en el que el resultado más justo habría sido el empate, pero en esta ocasión, la suerte cayó del lado blaugrana.

El Barcelona se lleva por la mínima el derbi del Indoor

Un derbi es un derbi y sino, que se lo pregunten a Rafa Marañón, técnico espanyolista, que a lo largo de la semana ha ido motivando a sus chicos con mensajes en el vestuario en las tres sesiones de entrenamiento que han tenido esta semana los pericos. El F.C Barcelona llegaba a Calafell dispuesto a mejorar la imagen de la temporada anterior, nefasta para sus intereses casi desde los inicios. Pero querían cambiar su racha en este inicio de la LIGA FERTIBERIA, con muchas esperanzas depositadas en ella, más aún habiendo sido campeones en la edición del 2009.

Para ello, los blaugranas tenían mucha pólvora en el terreno de juego. Sergi volvía al equipo después de estar inédito la campaña pasada y hablar de él nos indica que quieren más este año. Sergi dota al equipo de la fuerza necesaria para aguantar físicamente al equipo entero y su carácter ganador influye positivamente en el grupo. El actual técnico de la Sub 21 tampoco dudó en acudir a Calafell para aportar la templanza necesaria al medio del campo blaugrana. Él y Eusebio eran los dominadores del juego, pero el Espanyol salió a por sus primeros tres puntos.

Lo hizo además con Posse en plan estelar. No salió de inicio, pero cuando lo hizo volvió loca a la defensa de los hombres dirigidos por Óscar García, que también volvía al banquillo barcelonistas. El argentino puso en práctica las características que le hicieron triunfar como profesional. Rapidez y regate, quiebro y verticalidad fue lo que Posse demostró en esta primera parte sin un dueño claro del balón. El también perico Manel, con su poderoso físico, no exento de calidad, aguantaba la pelota como los ángeles para cederla a algún compañero mejor habilitado. A esto hay que sumarle el golpeo de Jordi Lardín, quién es el encargado de tirar todas las faltas del equipo y no se corta en lanzar a puerta cada vez que se le presentaba la ocasión de hacer gol.

Esta primera, caracterizada por la igualdad en el juego, fue para disfrute general de la afición que llenaba el pabellón, más de color blaugrana que perico, todo hay que decirlo. A cada gol espanyolista le seguía uno barcelonista y esa renta le hacía sentirse cómodo y a gusto. Pero Lardín tiene ganas de ser el jugador revelación de la Liga Fertiberia y lo demostró marcando los dos últimos goles de su equipo que le permitieron terminar la primera parte con empate en el marcador, dejando las espadas en todo lo alto.

En el segundo período arrancó con más pausa que la primera y con un fútbol más táctico, que permitía pensar las jugadas a los dos equipos. Los dos se sentían fuertes y querían llevarse el gato al agua, por eso había llegado el momento de pensar antes de actuar. El que pegara al principio, se podía llevar los tres puntos y fue el Barcelona el que por medio de Sergi y tres minutos más tarde De Quintana consiguieron abrir el marcador. Los hombres de Marañón, con dos goles en contra y viendo que se les escapaban sus opciones, pasaron al plan B. Convertir en un correcalles el partido era la opción que les quedaba. Eso hicieron y a punto estuvo de salirles bien porque Lardín siguió demostrando que está para hacer cosas grandes este año.

El catalán se echó al equipo a la espalda y consiguió empatar el encuentro a falta de tres minutos, que fueron frenéticos, con dos ocasiones clarísimas, una para cada equipo que malograron Alfonso Gómez y Ezquerro.

Pero lo mejor estaba por llegar y en el tiempo de descuento, Ezquerro se resarció en el último segundo haciendo el tanto de la victoria que les daban los primeros tres puntos. Partido frenético en el que el resultado más justo habría sido el empate, pero en esta ocasión, la suerte cayó del lado blaugrana. El Espanyol presentó su candidatura a hacer algo grande este año, basando su juego en una pareja, la formada por Posse y Lardín, que dará mucho que hablar.