FÚTBOL FEMENINO
Neid: "Ha sido difícil y lo será aún más"
Silvia Neid fue subcampeona del mundo en 1995 y campeona de Europa en 1989, 1991 y 1995 como futbolista; y dos veces campeona del mundo (2003 y 2007).
La web de la FIFA ha publicado hoy una entrevista con la última galardonada con el Balón de Oro a mejor entrenadora de fútbol femenino. Silvia Neid pertenece por pleno derecho al círculo de grandes personalidades del fútbol femenino. Su biografía se lee como una serie inacabable de triunfos: subcampeona del mundo en 1995 y campeona de Europa en 1989, 1991 y 1995 como futbolista; y dos veces campeona del mundo (2003 y 2007), cuatro veces campeona de Europa (1997, 2001, 2005 y 2009), y tres veces ganadora de la medalla de bronce olímpica (2000, 2004 y 2008) como segunda entrenadora y como seleccionadora.
Hace una semana, la estratega fue distinguida en Zúrich con el premio anual al Entrenador de Fútbol Femenino de la FIFA, que se emitía por primera vez. Poco antes de la ceremonia de entrega de los galardones, la directora técnica de la selección femenina de fútbol contó en exclusiva a FIFA.com sus impresiones sobre la euforia premundialista, la presión y la competencia cada vez más fuerte con las que tendrá que lidiar en la Copa Mundial Femenina de la FIFA Alemania 2011.
Sra. Neid, las tres candidatas al título de Entrenador de Fútbol Femenino del Año 2010 han sido mujeres. ¿Están ustedes más capacitadas que los hombres para entrenar a futbolistas femeninas?
No, no necesariamente. Es más bien una cuestión de aptitud. Hay unos cuantos puntos básicos, válidos para cualquier entrenador, con independencia del tipo de equipo que entrenen. Todo depende de la pericia de cada cual y de la clase de relación que mantenga con los jugadores a fin de transmitirles las ideas correspondientes. Creo que las mujeres pueden entrenar tan bien a los hombres como los hombres a las mujeres. Pero en último término, cada entrenador debe decidir por sí mismo si prefiere entrenar a un equipo femenino o masculino. Yo no diría que las mujeres son mejores entrenadoras de mujeres y los hombres mejores entrenadores de hombres.
De las tres candidatas seleccionadas ha habido dos entrenadoras alemanas, Maren Meinert y usted. ¿Dice algo ese dato acerca de la calidad del fútbol femenino alemán?
Junto a nosotras dos en el apartado de entrenadores, también fueron nominadas dos alemanas en el apartado de mejores futbolistas, Fatmire Bajramaj y Birgit Prinz. Eso nos ha llenado de orgullo a todas. Desde luego creo que en los últimos años hemos demostrado que pertenecemos a la élite mundial.
El año 2010 toca a su fin y comienza el 2011, cuyo punto álgido para el fútbol de las féminas será la Copa Mundial Femenina organizada por Alemania. ¿Con cuánta ilusión anticipa la cita global en su país?
A menudo me preguntan si celebrar el Mundial en mi propio país será un placer o un lastre. En Alemania todo el mundo espera que vamos a ganar el título. Yo trato de contener las expectativas en público. Está claro que nuestro sueño es proclamarnos campeonas del mundo por tercera vez consecutiva. Pero eso es muy difícil. Ha sido difícil en el pasado, y ahora será aún más difícil. De todos modos, tengo muchas ganas de que llegue el Mundial. Jugaremos ante nuestro propio público. Nuestro Comité Organizador, con Steffi Jones a la cabeza, ha hecho un excelente trabajo. Ya sabemos que va a acudir mucha gente a los estadios. Y será un placer ver la gran calidad deportiva. Hay unas cuantas selecciones que han mejorado un montón; las asociaciones nacionales han realizado cuantiosas inversiones; de ahí que los entrenadores hayan podido trabajar con mucha más intensidad. Eso también se pondrá de manifiesto en este Mundial de 2011 en Alemania.
Ha mencionado que hay mucha gente que espera que ustedes se alcen con el tercer título consecutivo. ¿Cómo se las arreglan las jugadoras y usted para soportar esa presión externa?
Por un lado cuento con muchas jugadoras que ya tienen una gran experiencia, incluso las jóvenes. No sólo han disputado numerosos partidos internacionales, sino también torneos enteros. Además, desde 2009 estamos trabajando con un psicólogo que está a nuestra entera disposición y conoce muy bien a las jugadoras. Nos estamos preparando lo más concienzudamente posible para este campeonato del mundo. Pero lo más importante es que todas nosotras ?el equipo, el cuerpo técnico y todo el entorno? lo disfrutemos. Que disfrutemos con lo que hacemos. Si trabajamos con alegría, confiamos las unas en las otras, y todas?jugadoras, entrenadoras y cuidadoras?procuramos sacar lo mejor de nosotras mismas, entonces tendremos la posibilidad de cumplir nuestro sueño. Otra cosa que debemos tener en cuenta es que no habrá otro Mundial en Alemania en mucho tiempo. Tenemos que aprovechar esta oportunidad.
¿Qué tal va su planificación del equipo que disputará el Mundial? ¿Habrá sorpresas? Estamos pensando por ejemplo en la de David Odonkor en 2006...
No habrá sorpresas. Estoy haciendo los preparativos con 26 jugadoras, de las cuales 21 formarán la selección definitiva. Y todas ellas serán futbolistas conocidas. Unas más y otras menos, todas han jugado ya partidos internacionales. Tengo bastante claro cuál va a ser el equipo.
¿Cuáles son sus expectativas personales en lo tocante al torneo? ¿Será otro festival de fábula como el de 2006?
En cualquier caso será un acontecimiento fabuloso, pero no tendrá la misma dimensión que el Mundial masculino de 2006. Será más pequeño, pero también muy bonito. A los estadios acudirán muchas familias. Y por supuesto, esperamos que haga tan buen tiempo como en el de 2006. También habrá zonas reservadas para los aficionados, por ejemplo, pero todo se hará a una escala un poco más reducida.
¿Qué equipos en particular podrían poner en peligro la revalidación del título mundial por parte de Alemania?
Tengo muchos en esa lista. El primero, naturalmente, Brasil, y luego Estados Unidos. A Suecia la veo capaz de todo, igualmente. Nigeria es una selección fuerte; acabamos de ganarles 8-0, pero las nigerianas pueden hacerlo mucho mejor. En julio, Nigeria estará muy bien preparada, y seguro que no tolerará otra derrota semejante. Canadá ha avanzado increíblemente en los últimos años, y su entrenadora Carolina Morace ha introducido un nuevo sistema de juego con estupendos resultados. Inglaterra, en mi opinión, lleva años progresando. Y no podemos olvidar a Noruega. La RDP de Corea y Japón también están en esa lista.
¿Qué piensa de las novatas mundialistas Colombia y Guinea Ecuatorial?
Observé a Colombia en el Mundial Sub-20. Ahí ya se vio la clase de fútbol que juega: bonito, técnico, organizado. Dispone de futbolistas muy rápidas. De Guinea Ecuatorial no puedo decir mucho. Pero creo que jugará parecido a Nigeria y que sus jugadoras, que son muy robustas, serán combativas y correosas. Así que no conviene subestimarlas.
¿Cuáles diría que son sus tres principales características como entrenadora?
La disciplina siempre está para mí en primer plano. Soy muy franca, también con mis jugadoras. Cuando era futbolista siempre me gustaba que el entrenador me dijera exactamente lo que tenía que hacer sobre el terreno de juego y lo que pensaba de mi rendimiento. Y para mí la confianza es muy importante. La confianza en mis jugadoras, en mi cuerpo técnico. Obviamente, espero que ellas también confíen en mí. Por lo demás, soy muy apasionada y emocional.
Última pregunta: ¿qué deseos tiene para 2011?
En lo personal, la salud, naturalmente. Es importante llegar sana a un Mundial, también como entrenadora. Además me deseo mucha calma. Porque eso es fundamental para poder hacer un buen trabajo. Por supuesto, quiero que vivamos un Mundial maravilloso, que contribuya a la sostenibilidad del fútbol femenino en Alemania y en el mundo entero. Y si me concedieran otro deseo, me pediría este titular para el 18 de julio: "Alemania se proclama por tercera vez consecutiva campeona del mundo" [ríe].