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alpinismo | tragedia en Perú

Una avalancha causó la muerte de montañeros españoles, que no tenían un guía

Formaban parte de una expedición al nevado de Chacraraju, de 6.112 metros de altura. Sus cuerpos serán repatriados y el lunes llegarán a España.

Actualizado a
El nevado de Chacraraju, en la Cordillera Blanca peruana, se ha cobrado la vida de los montañeros españoles Daniel Crespo (27 años) y Alejandro Bonilla (26).
EFE

Una avalancha y la falta de un guía de la zona fueron los factores que causaron la muerte a los dos montañeros españoles en el nevado peruano Chacraraju, al que los expertos consideran uno de los más peligrosos para el escalada en Perú.

Los españoles Daniel Crespo, de 27 años, y Alejandro Bonilla, de 26 años, habían salido hace una semana rumbo al Chacraraju, ubicado en la región Ancash, a unos 385 kilómetros al norte de Lima, pero se perdió el rastro de ellos el pasado martes.

Los alpinistas habían estimado que su expedición duraría once días, durante los cuales intentarían escalar la pared izquierda, de mayor complejidad y riesgo, de este nevado de 6.112 metros de altura.

Sus cuerpos fueron hallados ayer por un grupo de rescate del Departamento de Salvamento de Alta Montaña (Depsam) de la Policía peruana y guías locales.

"Por lo que hemos determinado, ellos han estado escalando, se presume que el martes, la pared oeste del nevado cuando los alcanzó una avalancha", explicó hoy a Efe el mayor Max Trujillo, jefe de la Depsam.

Trujillo, que lideró el equipo de rescate, relató que sus cuerpos fueron encontrados en una zona colindante a la pared oeste y a unos treinta metros uno del otro.

"A Alejandro se le ha encontrado en la parte baja de la pared oeste, a unos 30 metros, al otro a sesenta metros hacia el lado opuesto", señaló.

El traslado de los cuerpos implicó una nueva travesía, ya que se tuvo que seguir en sentido inverso un tortuoso camino que los llevó primero hasta una laguna, donde luego se continuó el descenso en caballos hasta el campamento de Cebollapampa, de donde fueron transportados en un vehículo policial hasta la ciudad de Yungay.

"Nos ha tomado hasta unas 8 horas", relató Trujillo, quien dijo que la tarea de su equipo ha terminado con la intervención de un fiscal, que ha ordenado que los cuerpos sean sometidos en Yungay a la necropsia que ordena la ley peruana.

El jefe policial lamentó que los escaladores españoles hayan realizado su arriesgado ascenso sin contar con un guía peruano y confiando en su gran experiencia en el alpinismo.

Según un informe colgado en el portal de internet Desnivel.com, al menos uno de ellos formaba parte del equipo de alpinismo de la Federación Española de Deportes de Alta Montaña y Escalada (FEDME).

"Es cierto que ellos eran muy experimentados, pero han estado sin guías nacionales, los que, por otra parte, no los llevarían por esa zona", remarcó.

Trujillo aconsejó a los alpinistas que visitan los nevados peruanos que tengan en cuenta que cada año las rutas varían y que las zonas con grietas y avalanchas solo son conocidas por los guías que recorren esos lugares de manera constante.

"Lo más importante es contratar un guía experimentado, a pesar de que uno tenga experiencia y se haya paseado por todos los nevados del mundo, acá hay mucho nevados que son ''sui géneris''", indicó.

Los españoles fallecidos no eran primerizos en eso de escalar montañas difíciles y llevaban varios meses en Huaraz, la capital de Ancash, donde la temporada alta para ascender hasta los impresionantes glaciares dura de junio a septiembre, cuando remiten las lluvias.

Sus cuerpos permanecen ahora en Yungay, a la espera de los trámites para su eventual repatriación, aunque se deberá esperar al lunes para conocer la decisión de los familiares y de la empresa que los aseguraba en la práctica de este deporte extremo que les costó la vida.