fútbol indoor | fc barcelona 12 - real madrid 13
El Madrid se lleva el clásico sufriendo innecesariamente
Los blancos dominaron el encuentro aunque en los minutos finales el Barcelona se acercó peligrosamente en el marcador. amavisca y Julio Llorente guiaron a los madridistas, Barbará fue el máximo goleador del encuentro con cinco tantos.
El Real Madrid salió vencedor del derbi de veteranos tras ganar al FC Barcelona por 12-13. Sólo un gol de diferencia le dio a los madridistas la victoria aunque fueron los grandes dominadores del encuentro.
El partido comenzó tranquilo, sin muchas ocasiones para ambos equipos que parecían esperarse el uno al otro para ver quien tenía la suerte de abrir la lata.
La espera tan solo duró dos minutos pues Emilio Amavisca probó los reflejos de Bonano, que realizó una buena parada, y acto seguido fue Karanka quién inquietó la portería azulgrana con un disparo cruzado que ligeramente se marchó desviado.
A pesar de que las primeras ocasiones vinieron del lado madridista fue el Barça el que abrió el marcador gracias al gol de Christiansen. Primer disparo, primer gol. Sólo un minuto les duró la alegría a los azulgranas, pues Amavisca marcó para los blancos gracias a un duro disparo desde fuera del área frente al que el portero del Barça nada pudo hacer.
A partir de ahí el Barcelona comenzó a dominar el encuentro y amplió su ventaja en el marcador gracias a un golazo de falta por la escuadra de Barbará y al gol de Pinilla. Este dominio blaugrana sólo duró 10 minutos. Los blancos pisaron el acelerador y consiguieron un parcial de 0-5. Al filo del descanso el Barcelona acortó distancias pero no fue capaz de igualar el encuentro y se fueron al descanso con un marcador de 5-7.
En la segunda mitad, el dominio madridista fue apabullante aunque el Barça mantenía las diferencias gracias a la buena actuación de Joan Barbará, que acabó el encuentro con 5 goles.
A pesar del control del balón, los blancos llegaban menos que su rival aunque resultaban mucho más efectivos. Algo bastante llamativo ya que los 5 jugadores culés que estaban en esos minutos sobre el campo eran todos delanteros.
El Madrid daba pausa y tranquilidad al partido tocando la pelota. La conexión entre los hermanos Pérez, Alfonso e Iván, y el gran partido de Amavisca y Julio Llorente, dotó a los blancos de más profundidad y gracias a eso llegaron los goles que les distanciaban de los azulgranas.
En los minutos finales del partido, el Barça su puso las pilas gracias a un Angoy providencial, que atajó varias ocasiones clarísimas madridistas, y a un Barbará que puso en jaque al guardameta Maté. Los azulgranas arriesgaron y consiguieron acercarse en el marcador aunque finalmente no tuvieron tiempo para empatar el encuentro. El Madrid acabó el partido sufriendo.