'Juanito' ya tiene 39 años y esquía en Baviera

Ocho años después de los sucesos que conmocionaron los Juegos de Salt Lake City y la estructura del deporte olímpico español, Johann, Juanito Muehlegg vive apartado y feliz en las nieves de Baviera. Muehlegg cumplió 39 años en noviembre y se declara a sí mismo "un esquiador de fondo aficionado". Compite en carreras amistosas, entre aficionados de la zona de Oberammergau, a 75 km. de Múnich, en plenos Alpes bávaros. Junto a su madre y su hermano Martin, Johann mantiene su hotelito invernal, Zum Jeremia, 'Casa Jeremías', incluido en los tour operators de la zona. Sus ingresos proceden del hotel, de cursillos a ambiciosos aprendices del esquí de fondo y del trabajo de diseño y asesoramiento con Kneissl, firma austríaca especializada en esquíes y equipamiento invernal.

"No añoro y no tengo nada más que ganar en la competición; acabé harto del estrés y del acoso de los medios", señala Muehlegg (1,86), quien declaró a AS: "Lo mío no fue positivo, sino política". Un control positivo en sangre por el uso de darbepoetin-alfa (AraNesp), sustancia "análoga" a la EPO, le hizo perder tres medallas de oro. Solo contra todos es el título de la autobiografía de Johann (Ed. Pfaffenweiler). Ese título y sus frases sobre el estrés, medios y políticos sintetizan su memoria de Salt Lake City. Pero cuando Juanito tira de bastón, la nieve tiembla: como tembló en 2002, en Utah.