Irlanda venció bostezando

Irlanda venció a medio gas a una Italia demasiado errática abajo y especialmente vulnerable en el juego abierto. Los irlandeses supieron ver las carencias defensivas de los transalpinos en la segunda cortina y comenzaron a mover la almendra a través de sus tres cuartos buscando el intervalo. Así llegó el primer ensayo irish, que arrancó por el lado cerrado con Trimble, continuó con una diagonal de D'Arcy y acabó en el lado abierto con Heaslip posando. Además Italia concedía golpes fruto de su inferioridad en el set-piece y regalaba touches. Una de estas últimas fue aprovechada por O'Leary para posar el segundo ensayo irlandés. El partido era soporífero. Irlanda no quería e Italia no sabía. Tan tedioso era el juego que el zaguero Kearney se durmió en una patada y Robertson le tapó robándole la cartera y ensayando. Al descanso se llegaba 23-8.

La segunda parte fue un paseo. De ambos. O'Driscoll, con un par de patadas profundas, dejó claro que él no entiende de amnistias ni minutos de la basura. Pero el partido fue caminando hacia el final con poco, muy poco que destacar. Irlanda pasó dos patadas e Italia una. Se cierra el partido inaugural sin grandes conclusiones. Al menos para el vigente campeón. Italia debe cuidarse de no regalar tantos golpes, trabajar las touches y mejorar la segunda cortina defensiva, aunque en tras el descanso estuvo mejor. Pero claro, Irlanda nunca volvió realmente del vestuario tras el descanso.