Rugby | VI Naciones 2009 (4ª jornada)
El Irureta irlandés no se fía un pelo de Escocia
Kidney tiene enemigos íntimos en el banquillo rival
Para mis jugadores será un honor pisar el mismo césped que Toulouse". La frase de Declan Kidney, entonces técnico de Munster, incendió su vestuario antes de la final de la Heineken 2008. Popeye O'Connell rugía en el hotel: "Deccie es un bocazas. Merece un escarmiento". Munster reventó las apuestas, venció a Toulouse (16-13) y Kidney, Tío Deccie en Irlanda, logró su propósito: despertar a la bestia.
Hoy este profesor de matemáticas cuya máxima es "dos más dos extrañamente suman cuatro", ha aplicado su principio de psicología básico (el del palo y la zanahoria) para situar a Irlanda ante el partido más trascendental de su historia reciente, el que puede darle otro Grand Slam (el primero, y único, llegó en 1948). Antes debe ganar a Escocia en Murrayfield. Hace no tanto era más sencillo robar el tren de Glasgow. Por si acaso Deccie ha avisado: "La peor cuña es la de la propia madera". Lo dice por Mike Brewer, neozelandés que entrenaba hace un invierno al gran rival de Munster en Irlanda, Leinster. Brewer, con alguna muesca en su revólver ante la Apisonadora de Limerick, dirige hoy a la delantera escocesa. La segunda cuña es Graham Steadman, técnico defensivo irlandés el pasado otoño.
Más Kidney: "Hace 60 días nos separaban 26 milésimas en el ránking de Escocia. Han cambiado cuatro cosas: dos patadas dentro nuestras y dos fuera de ellos". Puro Irureta. Y mientras en Edimburgo alguno rebuznaba ("O'Gara no placa un pez en una bandeja"), Irlanda canturreaba en un concierto privado con Christy Moore, el Peret irlandés. Era la zanahoria de Kidney. Y a todo esto, Gales haciendo turismo en Roma...