Francia deja a Gales sin Grand Slam y peleará por el título

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Francia deja a Gales sin Grand Slam y peleará por el título

Francia deja a Gales sin Grand Slam y peleará por el título

EP

El partido arrancó hosco y sólo la dinamicidad de los delanteros galeses, más ágiles que los mastodontes galos, les permitió arrancar un par de golpes.

Marc Lievremont quiere mantener un estilo, el del rugby a la mano, la excelencia de este deporte, y para ello no duda en utilizar un rugby cargado de fases protagonizado por sus delanteros. Lievremont trata de castigar a los rivales con el empuje de una delantera que cambia los collares pero no los perros: Chabal, Nallet, Harinordoquy, Marconnet... El problema viene en los medios. Francia ha tenido media docena de aperturas en los dos años de estadía de Lievremont en el banquillo: Skrela, Traille, Trinh-Duc, Beauxis, Baby... Jugadores de perfiles varios, estilos diferentes y filosofías variopintas. Ante tal despliegue caótico, Francia no acaba de encontrar el oremus. Ayer advirtió, al anunciar la titularidad de Baby, un banderillero muleta en mano, que saldría del partido ante Gales como "genio o villano".

El partido arrancó hosco y sólo la dinamicidad de los delanteros galeses, más ágiles que los mastodontes galos, les permitió arrancar un par de golpes. Francia abanderó el 'a la carga' ante el desempeño ramplón de un Baby más físico que neuronal. En una de esas acometidas Harinordoquy posó la bola formando parte del ruck. Mal hecho. Minutos después una carga galesa dibujaba una tensa al intervalo por la que se filtraba el zaguero Lee Byrne. El ensayo ponñía tierra de por medio. Demasiada para una Francia mezquina en ideas con un Parra plano y un Baby desafortunado. Un golpe pasado por Parra puso al XV del gallo a distancia de ensayo cuando Baby fue susituido por lesión por un apertura nato: Trinh Duc. El primer efecto lateral fue un ensayo de Dusatoir tras una gran jugada del inabracable Harinordoquy. Al descanso se llegaba con un empate fruto del empuje francés y la pegada galesa.

En la segunda parte Gales salió encorajinada y llegó a pisar la 22 en un par de ocasiones con cierta intencionalidad. Francia insistía en buscar el eje profunda, en entrar en el bosque aunque tumbaba más árboles de los que sorteaba. En el 47 Francia desperdició su primera opción de adelantarse en un golpe de Parra. La pelota era francesa, lo que sin ser un inconveniente para los dragones, le acarreó más problemas de los previstos. Los terceras galeses limpiaron bien los rucks ante las manos de mantequilla galas. Pero con Trihn Duc el cuento había cambiado. La bola corría más alegre y más tensa atrás, para regocijo de Medard, Malzieu y Heymans. Y así llegó el ensayo de Heymans en una salida a campo abierto. Gales estaba contra las cuerdas, el Grand Slam se le escapaba. Consecuencias: Peel, Henson y Hook al campo. 30 minutos de zafarrancho. Oleadas a la mano, cargas interminables, touch-mano-intervalo... Pero Francia defendió como leones. No habrá Grand Slam. Un inmenso partido de rugby, el primero en viernes noche de la historia, devolvió a Gales sin corona, pero con honor.