Las tenistas Lilí Álvarez, Rosa Torres, Fondorona y Marnet fueron las primeras españolas en participar en unos Juegos Olímpicos, los de París'24. Pero la primera española en ganar una medalla olímpica fue Blanca Fernández Ochoa, en los Juegos de Invierno de Albertville'92, donde fue bronce. Luego, en Barcelona'92, la judoka Miriam Blasco se convirtió en la primera española en ganar un oro olímpico. En aquellos Juegos se consiguió una medalla cada 16 participantes, mientras que los chicos necesitaron 22. En Atlanta'96 la proporción fue de una medalla cada 15 participantes en las mujeres por una cada 18 en los hombres. En Sydney'00 fue de una medalla femenina cada 26 deportistas por una cada 31 en el caso de los hombres. Sólo en Atenas'04 la tendencia se invirtió: una medalla cada 15 participantes en los hombres por una cada 29 en las mujeres.