Amigos, esto es lo que hay

Mientras esta semana en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas asistíamos a un espectáculo bochornoso e inédito en el mundo del deporte, con una rueda de prensa entre un seleccionador y un futbolista para explicar lo inexplicable, 24 jugadores de rugby se entrenaban desde el miércoles para intentar ganar a Rumanía, una selección mundialista, y a punto han estado de hacerlo. El mismo día de la rueda de prensa estos 24 jugadores, que tienen que ausentarse de sus trabajos y estudios para representar a su país, llegaron a repartir entradas a los usuarios de un tren de cercanías. Qué próximos a la gente, qué normalidad. Pero la atención mediática en comparación con los otros dos personajes es ínfima. Eso me hace pensar en los valores morales y éticos, en los nuevos ídolos. Quizás nos hemos desviado del deporte puro. Deberíamos valorar más el esfuerzo de este tipo de deportistas.

Nuestro rugby crece a pasos agigantados gracias a gente que hace las cosas bien como su seleccionador el inglés Ged Glynn. Por él Pablo Feijoo ha firmado por Leicester y juega de titular en Waterloo y por él Jaime Nava ha estado entrenando con Wigan en Inglaterra y el que ha dado un punto de orgullo que siente el rugby y actúa como auténticos deportistas. Al menos 12.000 espectadores que había en el Central se han dado cuenta de lo que hay y cada día hay más. Una pena que estos deportistas tengan que ir mendigando un espacio en los medios. Y de lo de los otros dos...