Ciclismo | Vuelta a España
Su majestad los Lagos
Comienza la carrera de verdad. Los Lagos de Covadonga pondrán a prueba a los favoritos para llevarse la Vuelta. Hoy no sabremos quién es el principal aspirante, pero conoceremos el estado de forma de los tocados Pereiro y Cunego y las intenciones con las que ha llegado Cadel Evans.
Los favoritos de la Vuelta afrontan esta tarde su primera gran batalla: los Lagos de Covadonga. Cima mítica de la carrera hasta el punto de que es la montaña que más veces ha acogido un final de etapa (14 veces) y que busca un nuevo vencedor, pues sus ganadores anteriores, o ya están retirados, como Pedro Delgado (1985 y 92), el colombiano Lucho Herrera (1987 y 91) y el francés Jalabert (1994 y 96), que lo coronaron dos veces, o no participan este año, como Mercado (2001) o Eladio Jiménez (2005).
Al ganador le espera doble galardón, pues además de incluir esta cima en su palmarés se llevará con toda seguridad el jersey oro. "Me gustaría ponerme líder en los Lagos", afirma el madrileño Marchante. "De pequeño acompañaba a mi padre, que subió varias veces esta montaña en marcha cicloturista, y me haría mucha ilusión ganar esta etapa".
Prudencia.
Marchante es el más lanzado de todos los favoritos. La mayoría acoge la etapa con precaución y piensa que todavía no es el momento de jugárselo todo a una carta. "La Vuelta no se acabará en los Lagos, habrá diferencias, pero no serán decisivas", apunta Menchov. Samuel Sánchez la afrontará a la defensiva. "Yo quiero llegar bien al Mundial y a las últimas clásicas. Mi preparación es para estar a tope al final de la Vuelta. Esta subida me pilla un poco pronto. Si pierdo menos de un minuto me quedaré satisfecho". Para Óscar Pereiro y Carlos Sastre, magullados por las caídas de estos días, también será un día para aguantar.
Sastre cree que habrá mayores diferencias que en La Covatilla (primera meta de montaña del año pasado). "Este puerto es más largo y tiene también duras rampas. Pero dependerá de muchos factores: la velocidad con que subamos, el clima". Como todos, Sastre espera ver allí "quién está en forma y quién a pasar el trámite". Pero ya ha detectado algo: "No veo a Evans con la facilidad que marchaba en el Tour".