'Alinghi', a un paso de alzar su segunda Copa

La derrota del Emirates Team New Zealand del pasado viernes frente al Alinghi suizo, además de romper el empate de la final de la 32ª Copa América en favor de los helvéticos (3-2) rompió también algo más: el sólido bloque que hasta ese momento había mostrado la tripulación kiwi.

Grant Dalton, director del equipo neozelandés, realizaba ayer un cambio sorprendente dejando en tierra al trimmer Grant Loretz, uno de sus titulares indiscutibles, para dar entrada a Rob Salthouse, fichado para esta edición y que no había competido desde 1992.

Punto clave. Ambos equipos sabían que el punto de ayer iba a ser clave y después de dos derrotas consecutivas el NZL-92 fue a por todas. Después de una salida igualada, dominó al SUI-100 y pasó la segunda boya, mitad del recorrido, con 11 segundos de ventaja.

Ahí empezó un fuerte ataque del Alinghi, con constantes viradas, empujando al NZL-92 hacia el extremo izquierdo del campo de regatas. A diferencia de otras jornadas la respuesta neozelandesa fue tímida y el táctico del Alinghi, el neozelandés Brad Butterworth, apoyado magistralmente por el navegante español Joan Vila, se dio cuenta del punto débil rival. Sería el final del NZL-92, que se veía superado en más de 30 metros y 16 segundos al paso por la tercera boya. Los neozelandeses ya no reaccionarían y llegaba el 4-2 para el Alinghi, que hoy puede alzar de nuevo la Jarra de las 100 Guineas.