Sorpresa en el Grand National, la legendaria carrera de obstáculos del hipódromo de Aintree. Los caballos más cotizados en las apuestas quedaron atrás, mientras que Silver Birch (algo así como Abedul de Plata, en español), se llevó el triunfo en la recta final, en una competición disputada sobre una auténtica alfombra, y en la que supo esperar al momento decisivo para imponerse a sus rivales.

Su victoria se pagaba 33 a 1, pero el ganador, con la monta de Robbie Power, fue muy superior a Joes Edge (8 a 1 y favorito de la crítica especializada), a Point Barrow (cotizado 9-1) y a los vencedores de los dos últimos años, Numbersixvalverde (14-1) y Hedgehunter (12-1). Una sorpresa que dio una pequeña fortuna a los apostadores más arriesgados... o a los más entendidos.

Salida nula.

Tras la partida, que se demoró varios minutos a causa de una salida falsa, Naunton Brook dominó hasta el ecuador de la carrera de 30 obstáculos, para ceder después. Silver Birch se mostró muy superior al final y se llevó la victoria, aunque peleando duramente con Mckelvey y Slim Pickings, segundo y tercero en la meta.

Consiguieron sobrevivir al tremendo esfuerzo de los 7.200 metros doce de los 40 caballos que tomaron la salida.

Es la sexta victoria para un caballo irlandés en las últimas nueve ediciones del Grand National. Silver Birch reafirmó el dominio de la verde Irlanda en el hipódromo inglés.

"Este es un sueño hecho realidad. No puedo imaginar nada mejor", dijo Robbie Power al terminar la prueba, tras conducir a Abedul de Plata a la victoria. "Gordon Elliott, el preparador, ha hecho un buen trabajo", añadió.

Elliott, por cierto, lleva sólo un año como entrenador y, tras la victoria de su caballo, no pudo reprimir la alegría: "Silver Birch ha saltado como un machote".