Ciclismo | Vuelta al País Vasco
Valverde y Contador frente a una legión de extranjeros
La primera de las tres metas en alto abre hoy la carrera
Aver en qué carrera se puede encontrar la participación que hay aquí? En el Tour de Francia, vale. ¿Y después...? A esta Vuelta al País Vasco han venido todos los mejores especialistas en carreras cortas por etapas". Y tiene razón Josean Fernández Matxin, técnico del Saunier Duval. En su mismo equipo hay tres corredores aspirantes a esta ronda: Gómez Marchante, vencedor el año pasado, Koldo Gil e Iban Mayo. "Y aún tengo otro que lo traigo de tapado", asegura Matxin.
La Vuelta al País Vasco está situada en un lugar idóneo en el calendario. Una encrucijada en la que se juntan los corredores que van a atacar la segunda oleada de clásicas (Amstel, Flecha y Lieja) y los que van a hacer sus test de cara al Giro de Italia. Y no es sólo un campo de entrenamientos, la carrera ya es un objetivo en sí para muchos o, en todo caso, pelean por un triunfo de etapa que les refuerce la moral.
Los italianos Rebellin y Di Luca, el luxemburgués Schleck, el alemán Voigt y el australiano Evans, por sólo citar a cinco, son los más pronosticados de cara a un triunfo final. En el bando local: Valverde, Contador y Samuel Sánchez, también para no alargar la lista.
34 puertos.
Gran cartel de actores para un escenario impresionante. Treinta y cuatro puertos salpican el recorrido de esta carrera en sus primeras cinco etapas. La última es una contrarreloj, para compensar tan duro recorrido que incluye tres llegadas en alto. "Casi cuatro", corrige Eusebio Unzué, técnico del Caisse d'Epargne, "pues la de Oiartzun (5ª etapa) también hay que considerarla. La primera jornada ya es muy selectiva. Hoy ya vamos a tener diferencias sensibles entre los favoritos. El puerto final es corto, pero muy explosivo". Un recorrido que le puede ir muy bien a su líder, Valverde. Subidas cortas y duras y una contrarreloj final corta (14 km) que cada día se le dan mejor, "Alejandro está bien, pero todavía no ha alcanzado su tope", explica Unzué.
También Contador da muy bien ese perfil. Pero con tanto puerto y tanta fiera suelta va a ser una carrera muy táctica, difícil de controlar y que se puede decidir en cualquier etapa, con cualquier emboscada. Y habrá que contar con el clima. Esta carrera es muy diferente con lluvia o sin ella. Anunciaba mal tiempo, pero de momento luce el sol entre pocas nubes.