Ciclismo | Clásica de Almería
Muraglia rompe la racha española
Sastre se metió en la escapada
El italiano Giusseppe Muraglia (Acqua&Sapone) cortó la racha de triunfos españoles en la Clásica de Almería, que había visto como vencedores a Iván Gutiérrez (2005) y Fran Pérez (2006). Junto a la del malogrado Isaac Gálvez (2000), éstas han sido las únicas victorias locales en una prueba que dominan los extranjeros.
Pero en lo que sí se ha roto la tendencia es en las llegadas al sprint, que era el hábito hasta estos últimos cuatro años, en que han triunfado las escapadas. Muraglia se metió en la fuga buena en la subida a Lucainena de las Torres, junto a otros 16 corredores entre los que estaba Carlos Sastre, que se dejó ver en su primera carrera del año.
Poco después, a 30 km de la meta, saltarían cuatro hombres de ese grupo: Muraglia, el ruso Eduard Vorganov (Karpin-Galicia), Juan Olmo (Andalucía-Cajasur) y Vicente Ballester Olmo (Fuerteventura).
En el pelotón tiraba el Rabobank para llegar al sprint y jugarse la baza de Freire, pero al no encontrar ayuda llegó un momento en que se paró, nadie tomó la responsabilidad y el pelotón llegó a casi 14 minutos de los fugados. Tampoco en el grupo perseguidor hubo entendimiento y los cuatro fugados se pelearon por la victoria en los últimos kilómetros, con varios intentos de fuga. Muraglia fue el único que no lo intentó, guardó sus fuerzas para el sprint y ganó con claridad.
Boonen, en Kuurne.
En Bélgica se disputó la Kuurne-Bruselas-Kuurne, en la que el belga Tom Boonen también venció con suficiencia en el sprint final. Su equipo, el Quick Step, controló la carrera y neutralizó la última fuga del belga Devolder, el alemán Siedler y el holandés Pronk.