Tenis | Copa Masters
Federer vence a Nadal y se coloca en la final
El suizo derrotó al español en la primera semifinal por 6-4 y 7-5 en una hora y 53 minutos
El suizo Roger Federer necesitó tres bolas de partido para doblegar al español Rafael Nadal, por 6-4 y 7-5 en una hora y 53 minutos, en el primer duelo entre ambos en pista cubierta, para alcanzar por cuarta vez consecutiva la final de la Copa Masters que se disputa en Shanghai.
Federer se medirá en la final con el vencedor del encuentro que se disputará a continuación entre el estadounidense James Blake y el argentino David Nalbandian.
Con esta victoria, Federer acorta diferencias y ahora Nadal domina por 6-3 en el total, y 4-2 esta temporada. Pero este es el segundo triunfo de Federer sobre Nadal de forma consecutiva, después de la de Wimbledon en julio.
Nadal resistió como pudo ante el mejor Federer de la historia, como él mismo se ha descrito a su llegada a Shanghai, donde el pasado año fue derrotado en la final por el argentino David Nalbandian.
El suizo se mostró como un huracán en el primer set, y comenzó el primer juego con tres saques directos para lograr una ventaja de 3-0, e incluso tuvo dos puntos para marcar el 4-0 ante un desconcertado Nadal.
Pero el español sabe cómo jugar al helvético. No se arruga, y aunque se vio dominado por 5-2 realizó dos juegos espectaculares, que ganó en blanco, para intimidar al suizo 5-4. No obstante, Nadal no pudo continuar ese arranque vital y cedió el servicio a continuación para entregar la manga en un intercambio de 27 golpes que al final cayó del lado de Federer.
Este 'precalentamiento' sirvió para animar a Nadal, que ya no se dejó intimidar por el espectacular despliegue del suizo en el primer set. El de Manacor incluso tuvo un punto de ruptura en el quinto juego, pero lo dejó escapar, y ahí se acabaron ya sus oportunidades.
Los últimos juegos del encuentro fueron los más apasionados, con los 15.000 espectadores del Qi Zhong Stadium prendados del duelo. Nadal, sin poder colocar su primer saque, salvó dos bolas de partido en el décimo, y parecía capaz de alcanzar el desempate, pero en el duodécimo reapareció de nuevo un genial Federer con un formidable revés. Y el tercer 'match point' fue esta vez suficiente.