Golf | Ryder Cup
Europa golpea primero y Sergio se come a Tiger
Cuenta la leyenda de la Ryder que Tiger Woods pierde más que gana. Ayer ganó en la matinal y perdió por la tarde. También cuenta que Sergio García es un seguro (12 partidos ganados) y que la pareja española siempre es una garantía. La leyenda de la Ryder no falla. Ayer, al menos.
Una liebre correteó asustada por la calle del 8. El cuervo la miró desde su atalaya y la garza real hizo un vuelo rasante ante Sergio en el 16. Son los encantos de un K Club que presumió de sol, viento y lluvia para atender a un duelo de Ryder en español con Tiger de invitado. Sergio se lo comió crudo con un par de golpes bajo presión (hoyos 16 y 17) cuando el sol se ponía. Furyk acabó claudicando en el 18 al mandar la bola de Tiger al agua con un gancho impropio. Era el dos de dos para García, el único pleno europeo.
Por la mañana con la pareja del gen de Seve y, por la tarde, en un mano a mano entre Sergio y Tiger, con partenaires, que acabó siendo un emocionante duelo entre los dos transatlánticos de este acontecimiento benéfico (la Ryder no lucra a sus 24 participantes).
Europa manda
Sergio sonríe en la Ryder. Europa lo agradece y su juego también. Él y Olazábal se ventilaron a Toms y Wetterich en 16 hoyos. Bordó el papel de estrella y Olazábal, el de consejero. Tantas tardes de angustia se redimieron ayer de una tacada, desde el 1 (putt de cuatro metros para empezar con ventaja) hasta el 16 (dos putts de triunfo desde 12 metros). El tránsito más cómodo de la mañana para Europa estuvo plagado de grandes momentos... No faltó ni el abrazo de Severiano en el 10. Ballesteros, el padre de la criatura. Con Mickelson KO y el partido B reñido, resultaba inevitable virar tras los pasos de Tiger. Ganó por la mañana con Furyk, pero sin acabar de sacudirse su maldita Ryder. Probó dos aguas (1 y 13) y venció por agotamiento y lógica, eso sí, sin reírse. Europa manda 5-3. Igualdad. Siete de los ocho partidos llegaron al 18.