Ciclismo | Giro de Italia (17ª etapa)
Piepoli le da el segundo triunfo al Saunier Duval
El mal tiempo impidió la ascensión al Plan de Corones.
El Giro se quedó sin una etapa que prometía ser mítica. La ascensión al Plan de Corones se tuvo que recortar en sus últimos 5,5 km, los más duros. La lluvia e incluso nieve, hacían impracticables las rampas del 24%, las ruedas de las bicis habrían patinado en ellas. Además, en el descenso del Erebe, el puerto anterior, se habían acumulado hasta 30 centímetros de nieve en alguna zona y también fue anulado.
Nos quedamos privados de una jornada de ciclismo extremo, pero el resultado hubiera sido parecido. Como en las últimas montañas los cuatro hombres que quedaron en cabeza en la batalla final fueron los mismos, si bien, esta vez Piepoli fue liberado de remolcar a Simoni, se fue para arriba con Basso y ganó un sprint que el líder ni siquiera disputó.
Y Quique Gutiérrez ahí, a sólo quince segunditos de los dos. Pese a lo repetido de la sorpresa, no deja de ser notable que este valenciano, de 1,89 metros y que siempre destacó como rodador y contrarrelojista, sea capaz de superar en las montañas a numerosos y acreditados escaladores. Ya no hablamos del podio, sino del segundo puesto.
A los 34 años.
También Piepoli podría hacerle daño a Quique, pero el italiano salió con mentalidad de gregario y ahora, que se ve como el segundo ciclista más fuerte del Giro, está a 18 minutos.
A sus 34 años Leonardo Piepoli ha encontrado por fin la gloria en su país. Él, que a principios de los noventa rivalizaba como aficionado con Pantani y Simoni, que vio cómo se estancaba su carrera al concatenar tres fracturas de clavícula y otras tres de brazo, que tuvo que emigrar a España, donde lleva ya siete años. Él, que suma trece victorias en las más importantes cimas de montaña españolas, además de la general de cinco pequeñas vueltas. Él, salvo en su primer año de profesional (1996), nunca había ganado en Italia. Y ahora: dos etapas en el Giro.
Ivan Basso "Hicieron bien en acortar la etapa"
Hacía demasiado frío y lo hemos notado todavía más porque en los días anteriores habíamos corrido con treinta grados de temperatura. Los organizadores hicieron muy bien en acortar la etapa, las condiciones eran muy malas para subir a ese puerto tan duro. Nos advirtieron de las modificaciones en dos tiempos. Primero nos anunciaron la supresión del paso por el Erebe y luego, cuando faltaban unos 40 o 50 kilómetros, que tampoco se subiría hasta Plan de Corones. No le he hecho ninguna concesión a Piepoli en el final de la etapa. Estaba muy fuerte y pienso que si hubiéramos llegado a la cima hubiera ganado igual".