Vinokourov gana al frío de Navacerrada y al Discovery

El termómetro marcaba cero grados cuando los participantes de la Vuelta a Castilla y León coronaron Navacerrada. No eran aún las cuatro de la tarde, caía aguanieve y soplaba un viento helado. Nada más cruzar la meta los ciclistas huían hacia los autobuses o autocaravanas. Una vez allí se desvestían totalmente para forrarse de ropa seca (maillot, forro polar, anorak) y mientras tanto ingerían con ansia té caliente. Fueron más de cuatro horas, 149 km, con un tiempo infernal y cuatro puertos: La Cruz de Hierro, Los Leones y dos veces Navacerrada.

En estas condiciones, contrarias a las que tendrán en el Tour, el Liberty y el Discovery, dos de los favoritos para la ronda francesa, midieron fuerzas en esta extraña escaramuza. Ganó el Liberty, de largo. Sus corredores marcaron el ritmo en la ascensión y dominaron el grupo de favoritos. A dos kilómetros, Vinokourov y Luis León Sánchez estaban entre los seis más fuertes; del Discovery sólo quedaba Rubiera. De los teóricos jefes, Azevedo acababa de ceder, el ucraniano Popovych, lo hizo bastante antes.

Vinokourov aún tuvo fuerzas para demarrar a medio kilómetro de la cima y sacar unos segundos más que le reafirman en el liderato. Ahora tiene catorce sobre su compañero Luis León y 19 respecto a Rubiera. Bien respaldado por su equipo, la ventaja debe ser suficiente para que hoy se proclame vencedor.

Por delante de este ensayo pre Tour, se libró la pelea por la etapa. Una lucha de supervivencia en un clima infernal que iba castigando a los que se atrevían a fugarse. El grupo inicial de diez que saltaron en La Cruz de Hierro se fue recomponiendo continuamente, con corredores que cedían y otros que llegaban.

Sólo dos resistieron de principio a fin. De ellos, Marco Fertonani fue más fuerte que Triki Beltrán en la última ascensión. Undécima victoria para el Illes Balears, que sigue en racha. Sólo el Quick Step de Boonen y Bettini les supera con 19.