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Tenis | Dubai Open

En pista dura, Nadal también gana a Federer

El mismo Roger Federer, número uno del mundo, ya asumía las dificultades casi insalvables para ganar a Rafa Nadal en tierra batida. Pero ayer, sobre la pista dura y rapidísima de Dubai, Federer cedió a Nadal la ventaja psicológica y su triple corona del Dubai Open. Y Nadal vuela.

Sensacional triunfo de Rafa en Dubai y golpe moral al número uno
Afp / Reuters

Por educado que sea, Roger Federer va a recordar por mucho tiempo esta tarde de Dubai y una sombra cobriza, escurridiza y musculosa que le devolvía bolas como navajas. La bola de seda que Federer tejía y enviaba sobre la red, regresaba una y otra vez al campo del suizo. Sólo que, tras pasar por la raqueta de Rafael Nadal, la bola de seda mutaba en cuchilla de Manacor.

En una pista de tenis, Federer quizá sea lo más parecido al Presidente John F. Kennedy: por sus buenas maneras y sus alardes de clase. Pero toda la clase y la belleza carismática de President Kennedy saltaron por los aires en Dallas ante los balazos de un ejecutor solitario que no conocía a nadie y que disparaba con la fuerza de la desesperación. Desperado: eso, un personaje de película, en trance, es lo que parece Nadal en una pista. Un Niño Terrible. O un Toro Salvaje, como Jake La Motta, el incontenible peleador del Bronx que generó una interpretación fantástica de Robert DeNiro.

Y a lomos de esa desesperación, Nadal gana partidos y finales como ésta de Dubai o ésa de Ljubicic en Madrid que cualquier ser humano acomodado hubiese dejado escapar por el desagüe. No este Nadal. No en la pista. Sea dura, como la de Dubai, sea la que sea.

A estas horas, Federer aún debe estar herido. "Habrá más partidos entre nosotros", prometió Sir Roger a pie de pista, con gesto rarito, y bajo la mirada perdida de Bjorn Borg. Había otra mirada, la de Nadal: con el instinto primitivo del depredador saciado.

En la red

Guiado por el mismo Tony Roche que aconsejó a Lendl contra la zurda de McEnroe, Federer atacó a Nadal en la red desde el primer golpe. Y el primer set fue un paseo del suizo: 6-2, 90% de puntos ganados con el primer saque.

Ahí, Federer salió un poco. Y Nadal empezó a competir por su vida, asesinando el revés a una mano de Federer con bolas altísimas, con algo del lamento solitario del fusil de Dallas. En el segundo set, Nadal sobrevivió y se agigantó. Y en el tercero, Federer no soportó la tortura psicológica: y capituló, como Ljubicic en Madrid. Roger no olvidará esto. Pero ahora, él es la presa. El depredador, el cazador es Nadal.

El suizo estaba invicto en 2006

Nadie había ganado a Roger Federer en 2006... hasta que llegó Rafa Nadal. El resultado de ayer en Dubai es un mazazo a favor de Nadal y en contra de Federer, que sin ceder un solo set en Dubai, iba invicto (16-0) desde principios de año, y con una sola derrota en sus nueve finales anteriores: la Masters Cup de Shanghai, ante Nalbandián. Ahora, ésta de Dubai se trata de la décima final consecutiva ganada por Nadal, que ya se le escapa a Federer en los duelos cara a cara: 3-1. Además, el gran triunfo de Rafa evita el cuarto título consecutivo de Federer en Dubai.