Juegos Mediterráneos Almería 2005 | Voleibol
Doblete de Juanjo: triunfo matinal y boda vespertina
El central tuvo que pasar el control antidóping
Juanjo Salvador lo tuvo que hacer todo el 24 de junio de 2005. Hasta pasar un control antidoping después del debut de la Selección en los Juegos del Mediterráneo, ante Egipto. El trámite retrasó todo el proceso. Cinco íntimos amigos le esperaban en la casa de sus padres para pasar sus últimas horas como soltero. "A mi futura mujer no quiero ni verla, ni le voy a decir cómo hemos quedado".
Silvia Soler, ex jugadora de balonmano, su fan "número uno", no apareció por el pabellón Moisés Ruiz, nombre de un ex concejal fallecido, que hizo de todo para que el Unicaja Almería fuese hoy la primera potencia del voleibol español.
Así que Juanjo Salvador se levantó a las siete de la mañana y se puso a pedalear en una bicicleta estática en la Villa Mediterránea mientras Carlos Carreño, otro almeriense de la Selección de voleibol, apareció por sorpresa y se puso a tararearle la marcha nupcial ante la sorpresa de sirios, turcos y libaneses, que también se entrenaban a esa misma hora.
En el Pabellón, a las 11:00 horas, le esperaban el voleibol de hoy y de ayer: Rafa Pacual, Juan Carlos Robles, Jesús Sánchez Jover (hermano del mítico Paco) y Venancio Costa, en la grada. También Cosme Prenafeta, colocador retirado justo antes de los Juegos. "Es uno de los testigos de la boda", sonreía Juanjo Salvador liberado de la tensión al final del partido.
Por un momento al central internacional se le pasó por la cabeza lo peor. ¿Y si se lesionaba, cómo iría a la boda? Paco Hervás, seleccionador nacional, ofreció soluciones: "Ya teníamos pensado llevarlo en una camilla si hacía falta".El 24 de junio era el día perfecto de Juanjo Salvador, un internacional experimentado que llevó a la selección al triunfo ante Egipto (3-0, con gran facilidad ante una selección que no llevó a ninguna de las figuras que le han permitido estar en la Liga Mundial).
Noche de bodas.
A las 18:30 Juanjo ya estaba esperando en la puerta de la Virgen del Mar a Silvia Soler. "Sólo ha faltado poner una ermita en el estadio Mediterráneo y casarme allí". Almeriense, orgulloso de los Juegos, volverá a la Villa esta noche después de haber recibido permiso de Paco Hervás para hacer sus pinitos en la noche de bodas. Luego quiere un regalo de novio: "Ganar la medalla de oro". Y disfrutarla en Nueva York, donde irá de luna de miel. Todo, el 24 de junio de 2005. La fiesta de Almería, el día del cumpleaños de su mujer. El día perfecto.