Ciclismo | Vuelta a Suiza
Aitor González vence en Suiza como un campeón
Atacó a 33 km de meta, ganó la etapa en solitario y la general
Sólo un superclase puede ganar una carrera como hizo ayer Aitor González en la Vuelta a Suiza. Atacando a 33 km de meta, en el inicio de un durísimo puerto (Furka) de 2.431 metros de altitud, de cumbre aún nevada y con 18 kilómetros de rampas, dejando atrás a Ullrich al australiano Rogers, líder de la carrera, y al resto de los favoritos, para ir atrapando a todos los fugados, lanzarse en un vertiginoso descenso para ganar la etapa y la general final. Y todavía le sobraron 22 segundos. Hacía tiempo que no se veía darle la vuelta a la tortilla en la última etapa a una carrera de primer nivel.
Pero como el inolvidable Chava Jiménez, Aitor González es otro Curro Romero, capaz de lo mejor y de lo peor. Llevábamos dos años sin apenas noticias de él. Aunque bueno, ganó una etapa en el Giro 2003 y otra en el Tour 2004. Con eso ya habría muchos que se darían con un canto en los dientes para cerrar todo un palmarés.
El insurrecto
Pero de Aitor se esperaba mucho más cuando en la Vuelta a España 2002 se transformó en un insurrecto, se rebeló ante las órdenes de Vicente Belda, que ordenó que la carrera la tenía que ganar Óscar Sevilla y pudo con todo, con las tensiones internas, con Heras, Beloki, Sevilla, Mayo, Simoni...
Ha pasado dos años perdido debajo de un maillot del Fassa Bortolo. Cuenta que el equipo italiano le rompió al diseñarle una postura más aerodinámica y una bicicleta con nuevas medidas. Pero que ya está arreglado.
Y habrá que creerle tras haber visto esa impresionante exhibición en los Alpes Suizos. Una etapa con tres puertos fuera de categoría, los tres por encima de los dos mil metros de altitud y de los 15 km de rampas. Una etapa corta, de sólo 100 km, y, por ello, corrida de manera explosiva, sin cuartel.
De salida se escalaba el primer puerto (Nufenen) y el primer ataque llegó nada más bajarse la bandera. Numerosos españoles entraron en el zafarrancho. Incluso Mayo trató de coger el tren de la escapada en el que entraron Laiseka, Atienza, Luis Pérez, Koldo Gil, Voigt, Beat Zberg y Montgomery, tras múltiples ataques y desfallecimientos en las dos primeras ascensiones. A todos ellos les pasó Aitor González como un rayo cuando atacó en el último puerto para ganar. Aitor ha vuelto.
Gorospe "Al Tour iremos con la moral bien a tope"
"Aitor ha hecho un carrerón y ha logrado un gran triunfo. Y además Laiseka ha rematado ganando la montaña. Tras esto y el triunfo de Landaluze en el Dauphiné Libéré iremos al Tour cargados de moral a jugarnos la baza de Iban Mayo, que ha hecho aquí una buena preparación. No se le ha visto en los primeros puestos porque ha ido muy tranquilo. Su punto de forma tiene que alcanzarlo durante la primera semana del Tour. Y aunque pierda tiempo en esos días, no debe desanimarse, porque hay mucha montaña".