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Golf | Masters de Augusta

Los españoles se hunden en la piscina de Augusta

Sólo Jiménez aguanta el tipo. Dos ingleses en cabeza

<b>MAL ARRANQUE. </b>Olazábal estuvo muy fallón en Augusta.
afp

Llueve que te llueve en Augusta, también en viernes, que acabó anoche con una suspensión hasta que hoy pueda reanudarse la segunda jornada. Por lo pronto, el mal tiempo se ha encargado de disipar cualquier esperanza española, casi al mismo ritmo que ha colocado a los Singh, Mickelson, Dimarco en la parte alta, como siempre, como si hiciera sol.

La clasificación provisional al cierre de esta edición nos deja a dos jugadores ingleses al frente del negociado. Howell y Donald son dos Ryder Cup boys que quieren tomar el relevo de Faldo, retirado el jueves por una lesión de espalda.

Dilatar la primera jornada no hizo nada más que recrudecer un momento dramático de Sergio García con el putt, también de Miguel Ángel Jiménez, y el desánimo de José María Olazábal. "No he jugado bien y ya está", dijo el vasco durante el receso entre vueltas apresuradas y nubes borrascosas. Cuentan que Sergio (77) y Olazábal (77) no tienen perdón por los fallos cometidos en los greenes, un tapete calado de agua pero igualmente noble. El Amen Corner fue la cruz para un Sergio García que mandó la bola contra los arbustos del 12, un hoyo-penalty que cuando se falla da mucha rabia. Le costó un doble bogey difícil de recuperar cuando tu espada es de mantequilla. Resumiendo: que a falta de un mundo por terminar la vuelta del viernes (en sábado), Olazábal y Sergio debían remar mucho todavía para aspirar a completar las cuatro vueltas es decir, quedar entre los 44 primeros (más empatados) y pasar el corte.

Jiménez aguanta el tipo bajo el agua como buen malagueño (¡!) aunque "parece que me muevan el hoyo cuando pateo porque no meto ni una". Su +2 le mete en el supuesto corte, a la espera de una remontada que nos remonte la moral patria a todos.

A Tiger Woods le costó más acabar la primera vuelta con un 74 (+2) que cuando completa esas rondas de seis o siete bajo par casi sin errores. El tres veces campeón en Augusta mandó un putt al agua desde el green (13). En el 14 se sentó en el green y su mal gesto a punto estuvo de costarle penalidad.

Woods se despertó ayer con el rumbo del drive girado, hasta el punto de que tuvo que patear su bolsa para descargar la ira de su desatino. "No es la primera vez que falla. Así es el golf", dijo Dimarco, que compartió partido con Tiger y al que no le gustaron los modales de Woods.

Billy Casper hizo 106 golpes

Ser campeón del Masters te permite jugarlo siempre. Al menos esta es la norma a día de hoy. Billy Casper, al margen de ganar 51 torneos en América, se lo llevó en 1970 así que a sus 73 años salió al campo en el lluvioso jueves. Completó los 18 hoyos con 106 golpes (34 sobre par), añadiéndole a la gesta un 14 en el hoyo 16, un par 3 en el que mandó cinco bolas al agua. "No entregué la tarjeta porque la voy a poner en un marco. Quise terminar la vuelta porque en Augusta estaban mis hijos", dijo Casper, que tiene uno de sus once hijos en la cárcel. El Gorila ya ha regresado a su casa.