"El Canoe es un ejemplo para el deporte madrileño"

Las instalaciones del Real Canoe Natación Club se quedaron ayer pequeñas para recibir a tantos socios, dirigentes, presidentes de federaciones... y, sobre todo, amigos, que se sumaron al acto inaugural de los festejos de su 75 aniversario. "El Canoe es un ejemplo para el deporte de Madrid. Desde aquel 1930 ha sabido evolucionar, crecer y convertirse en un modelo de iniciativa privada del deporte madrileño", enfatizó la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre.

Con una puntualidad casi británica, pasados apenas unos minutos de las 19:30, Esperanza Aguirre descubría la placa dedicada a los fundadores que pusieron en marcha un club que empezó siendo de montaña y que 75 años después cuenta con 5.500 socios. Entonces empezó un emocionante viaje por el pasado y el presente del club a través de su exposición fotográfica. Cientos de fotos que inmortalizaban los momentos más destacados del club decano de la natación española.

Aire nostálgico.

A las explicaciones del presidente del Canoe, Juan Tamames, atendieron con curiosidad, la propia Esperanza Aguirre, Jaime Lissavetzky, secretario de Estado para el Deporte, Santiago Fisas, consejero de Cultura y Deporte de la Comunidad de Madrid, Rafael Blanco, director general de Deportes del CSD, y el ex alcalde de la ciudad, José María Álvarez del Manzano, Pedro Ferrándiz, entre otros muchos. Entre foto y foto, se respiraba cierta nostalgia, como la de la ex nadadora Pilar von Carsten, junto a Paz Corominas, una de las dos mujeres españolas que participaron en los Juegos Olímpicos de México 1968. "¡Qué horror!", repetía Von Carsten al verse en unas fotos de los años sesenta. "Si estás mejor que entonces. Eres como los buenos vinos", respondió Esperanza Aguirre.

Con mucha curiosidad se contempló las fotos de aquellas primeras instalaciones del Canoe. Desde la piscina Niágara (en la actual zona de Príncipe Pío), un lavadero donde los osados primeros socios nadaban al tiempo que las mujeres madrileñas lavaban la ropa, la de la Isla, la primera piscina de invierno de Madrid, hasta las actuales instalaciones de la calle Pez Volador que se empezaron a edificar en 1962 y que cuentan con seis piscinas, polideportivo, gimnasio, praderas de verano...

Más de mil libros.

La biblioteca, legado del socio Enrique Ugarte, fue otra de las paradas obligadas en la incursión por los 75 años del Canoe. Rodeados de más de mil libros de aquel socio que fue seleccionador nacional de natación en los años 30, fueron firmando en el libro de honor las personalidades que asistieron al evento. La primera fue Esperanza Aguirre, que reconoció, tal y como quedó reflejado en su dedicatoria en el libro de honor, que era la primera vez que visitaba el club. Luego lo hizo Lissavetzky. "Es la cuarta vez que firmo: una como secretario de Estado, otra como director general del CSD, y dos como consejero de la Comunidad", repetía orgulloso Santiago Fisas.

Mientras el Canoe celebraba su acto más solemne, a escasos metros, cientos de socios practicaban deporte. Era su otro modo de celebrar el 75 aniversario del club de sus amores.