Jiménez roza la perfección y ya es segundo

Miguel Ángel Jiménez bordó un golf de altura en la segunda jornada del Abierto de Madrid, dio un espectáculo admirable en el Club de Campo, con un recorrido de 63 golpes (8 bajo par), y escaló hasta la segunda plaza a un golpe del nuevo líder, el inglés Paul Broadhurst.

"No me gano ni yo mismo". Así expresó Jiménez su gozo tras el espectacular registro libre de "bogeys" -el mejor de las dos jornadas disputadas-, que define el estado de gracia de este golfista de 40 años, que lleva esta temporada cuatro títulos conquistados en el circuito europeo y que acumula más de 1,8 millones de euros en ganancias oficiales.

"He jugado fantástico. Mejor casi es imposible", comentó, necesitado imperiosamente de exhalar el humo de su puro habano para unos pulmones ya de por sí hinchados tras una vuelta excepcional.

Jiménez tan sólo cometió dos mínimos errores, después de cuatro horas y media caminando por el Club de Campo: falló dos "putts" de no más de metro y medio para dejarse sendos "birdies". Lo demás fue espléndido. Su juego de "tee" a "green" fue mecánico, con un 87 por ciento de calles atrapadas y con un juego envidiable alrededor de "green" que motivó continuas algaradas en los aficionados.

"Me gusta sentir el ánimo del público. Sí, ciertamente me motiva que los aficionados estén arropando el partido. Espero que así siga hasta el domingo", declaró Jiménez, quien arrastró a la mayor parte de los espectadores madrileños para dejar en soledad al resto, incluido al escocés Colin Montgomerie, quien firmó el par aunque pasó holgadamente el corte.

El Abierto madrileño despidió a uno de los favoritos, el inglés David Howell, y lo domina Broadhurst, un buen profesional del circuito, de 39 años y que se gana bien la vida jugando al golf desde 1988. El inglés hizo 65 golpes y encabeza la clasificación con 132. Jiménez comparte puesto con el sueco Johan Edfords y el surafricano Darren Fichardt, mientras que por los puestos de cabeza merodean también excelentes jugadores, como el surafricano Immelman, el danés Anders Hansen, el norirlandés Graeme McDowell o el español José Manuel Lara, este último octavo a tres golpes de la cabeza.