Los atenienses se vuelcan con sus Juegos Paralímpicos

Atenas se volvió a volcar ayer con el deporte, esta vez con el paralímpico. El estadio que hace poco más de un mes ofrecía al mundo una de las ceremonias de inauguración más espectaculares de la historia, ayer volvió a mostrar un espectáculo sobresaliente y arropado por un público volcado con su pasado olímpico. La fiesta la presidió un gran árbol milenario en el centro del estadio que simbolizó el esfuerzo y el afán de superación de los deportistas. Desfilaron un total de 4.000 de 136 países, trece más que en Sydney y récord de naciones en unos Juegos Paralímpicos.

Arrollando. La delegación española salió en el puesto 42 y lo hizo de forma arrolladora. No era para menos, España es una de las delegaciones más numerosas. La nadadora donostiarra Sara Carracelas, de 22 años, estaba radiante de felicidad por llevar la bandera, un orgullo para la joven deportista. No faltaron las numerosas banderas españolas, con el toro de Osborne incluído, cómo no. Por cierto, tenía razón el nadador mallorquín Xavi Torres, impresionaba ver al equipo español. Somos muchos, decía Torres hace unos días. Ojalá lo sigan siendo sumando medallas.