Enfado policial por evitar un semáforo cerrado en Lieja

Entre vampiros de la UCI, gendarmes y demás líos, la verdad es que los equipos ciclistas no ganan para sustos. Al finalizar el entrenamiento y ya casi en Lieja, el equipo Euskaltel-Euskadi recibió una pequeña reprimenda de un policía local por saltarse un semáforo precisamente ¡en naranja!, aunque hay que reconocer que casi ya tirando a rojo. El furgón policial paró de inmediato a los tres corredores que iban rezagados en ese momento y se cebó precisamente con Iban Mayo. El enfado de uno de los policías fue tal que tuvo que intervenir Julián Gorospe para convencer al agente con su habitual tono conciliador. Al final todo se quedó en un susto.

De vuelta al hotel, Iban Mayo aún se acordaba de la reprimenda del agente: ¡Hay que ver cómo me ha gritado el tío! Se ha debido de creer que le había insultado o algo así. Pero si además yo no le entendía nada de lo que me decía. Menos mal que el uso del casco no es obligatorio para entrenarse por las carreteras de Bélgica, porque si no Iban, más dado a entrenarse con la gorrita del Euskaltel-Euskadi puesta del revés, se hubiera ganado otra bronca. Aquí cada uno tiene sus manías. A algunos, como a Iban, les gusta entrenarse con malla larga porque les da mayor sensación de calor en el músculo, explica Julian Gorospe.

Esperando la salida.

Pasado el disgusto, el líder del Euskaltel, expresó sus ganas de que llegue el sábado para tomar la salida en Lieja: Se me han hecho un poco largas las cuatro horas de entrenamiento, sobre todo porque al no conocer las carreteras tienes que ir muy pendiente de todos los detalles de la ruta y eso agota mucho. La verdad es que ya tengo muchas ganas de que llegue el sábado y arranque este Tour, confesaba Mayo.