Urdangarín, con los olímpicos de Atenas04

Con nostalgia por los tiempos pasados, el vicepresidente primero del Comité Olímpico Español (COE) y dos veces medallista (en Atlanta96 y Sydney00), Iñaki Urgandarín, visitó ayer las instalaciones del Centro de Alto Rendimiento (CAR) en Madrid y almorzó, en la residencia Joaquíon Blume, con los deportistas españoles que están entrenándose allí para los Juegos de Atenas.

El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Jaime Lissaveztky, le acompañó en su periplo, que incluyó una demostración del ejercicio que el equipo de rítmica prepara para Atenas (con cintas coloreadas como la bandera de España y música taurina) y una visita a los también gimnastas Jesús Carballo y Gervasio Deferr. Ni el Duque de Palma ni Jaime Lissaveztky se atrevieron a hacer pronósticos sobre el número de medallas que España sumará en Grecia. Estaremos a la altura del escalafón que ocupamos a nivel internacional. No es tiempo de hablar de medallas, lo que está ahí es el propio trabajo de nuestros deportistas, esgrimió el primero. Lissaveztky sonó más contundente: Es absurdo hablar de medallas cuando existen otros métodos, como los diplomas, para medir las calidad de los atletas en unas pruebas mundiales tan duras.

Ambos coincidieron también al señalar la ilusión de los deportistas ante la cita olímpica. Están deseando que llegue ya, enfatizó Lissaveztky. Y cuando lleguen contarán con todo el apoyo del COE. Nuestra postura es estar con ellos, darles apoyo, aliento y constancia. Además, yo intento siempre transmitirles mi experiencia: Vivir y ser olímpico es algo único, concluyó Iñaki Urdangarín.