La historia de la eurocopa (12) | Italia -1980
Final lamentable de la era Kubala
La última guerra de Kubala también terminó en derrota. Tras dejar fuera a Yugoslavia, Rumanía y Chipre, se acudió a Italia con las ilusiones de siempre. El esperanzador empate con Italia en San Siro no tuvo continuación feliz. Derrotados por Bélgica en un encuentro donde faltaron furia y acierto, se perdió en Nápoles ante Inglaterra la posibilidad de optar al tercer puesto.
La sexta Eurocopa comenzó para la Selección española en Zagreb. Todos tenían en el recuerdo el reciente choque de Belgrado, con el botellazo a Juanito y el gol espinillero de Rubén Cano. El ambiente fue infernal pero Kubala jugó sus bazas con acierto y al descanso se llegó con un 1-2 que pudo mantenerse en la segunda parte. Miguel Ángel estuvo espléndido en la defensa de su puerta.
La visita de Rumanía también acabó en victoria. Mestalla animó a los nuestros sin descanso, incluso cuando el desacierto de los delanteros adquirió tintes alarmantes. Tampoco Chipre presentó problemas en Salamanca.
La visita a Craiova era el más grave escollo para la clasificación de la fase final. Los rumanos habían derrotado a Yugoslavia y eran los grandes rivales. El empate inicial se rompió en la segunda parte gracias a un penalti convertido por Georgescu. Afortunadamente, de inmediato, Dani igualó el marcador. El juego se endureció, viviéndose varios momentos conflictivos que el árbitro resolvió con las expulsiones de San José y Crisan. Georgescu volvió a adelantar a los rumanos y el público explotó de entusiasmo. Menos mal que estaba el pequeño Dani en día de aciertos. Una gran jugada de Cundi la culminó el bilbaíno con un izquierdazo mortal. A partir de ese momento no se arriesgó en absoluto dando por bueno el resultado. Todo parecía resuelto. Había que recibir a Yugoslavia en Valencia y viajar a Chipre, por lo que la clasificación parecía asegurada.
Pero... se perdió con Yugoslavia en Mestalla en un encuentro muy mal planteado por Kubala y peor realizado por sus hombres. Había que triunfar en Limassol y allí, nuestro actual presidente federativo Ángel Villar marcó el gol de la tranquilidad a poco de comenzar el partido. Objetivo cumplido.
Sorprendió la lista de los 22 de Ku-bala. El seleccionador prescindió de hombres fijos en la fase clasificatoria y rescató a algunos veteranos ilustres. Además, en la concentración previa, comenzaron rumores más o menos fundados de traspasos, incluso del compromiso del mismísimo Kubala como técnico del Barça. No era el clima más apropiado para afrontar el viaje a Italia. Una vez más la Selección perdía protagonismo frente a los intereses de los clubes.
En San Siro, ya rebautizado con el histórico nombre de Giuseppe Meazza, se empató con los anfitriones. Era un buen resultado, pero tres días después se perdió con Bélgica jugando sin entusiasmo y con poco acierto. Todavía se podía optar a la tercera plaza, pero en Nápoles se repitió derrota con Inglaterra. ¡Arrivederci!