El candidato desconocido

No tengo el gusto de conocer al Sr. González González. Para ser candidato a la presidencia del Real Madrid basta con ser socio y que los bancos te avalen más de seis mil millones de pesetas. No hubo jamás elecciones, desde la muerte de Bernabéu, en las que no aparecieran aspirantes que eran desconocidos para el gran público o muy conocidos. Hemos visto pasar a cómicos, árbitros frustrados, empresarios de medio pelo, escritores y socios de a pie. Todo vale y es lícito. De Carlos González sabemos poco. Consultor informático, socio de nuevo cuño, sin abono y sin presencia en la vida social del club. La elección de Madrid como candidata olímpica ayer a la misma hora, le restó protagonismo. Hará falta reforzar el equipo asesor.

En su primera declaración de intenciones presentó un contraprograma. Me explico. Más que una declaración de intenciones novedosa, ha buscado las cuatro evidencias por las que es juzgado el mandato de Florentino para meter la cuchara. Igual el slogan no es el más apropiado ("Volvamos al fútbol") porque si algo ha hecho el que será su rival es llenar el estadio durante cuatro años. Sí merece que profundice en la descomunal deuda que ha detectado y en las posibles soluciones. Eso fue fundamental para que Florentino derrotara a Sanz en los anteriores comicios. Sobre lo de enterrar la palabra galácticos, me temo que ahí no tiene voz ni voto. Eso es cosa nuestra, de los medios.