El destino ha querido que Rayo y Getafe lleguen a su enfrentamiento de la segunda vuelta sin poder permitirse el mínimo margen de error. El equipo franjirrojo, porque tiene dañada la línea de flotación y un tropiezo en casa podría significar su hundimiento defi nitivo. La suma de sólo dos puntos de quince posibles en las cinco últimas jornadas le ha situado a tres de la línea que marca la permanencia. El azulón, porque la escala que le une con los puestos de ascenso puede ser más alargada si no puntúa en Vallecas, aunque por ahora se siente cómodo en su papel de aspirante y ya lleva siete jornadas sin perder.

Así las cosas y con los futbolistas justos para confeccionar la convocatoria, Chechu Rojo tendrá que hacer nuevamente cambios obligados en el equipo titular. El entrenador del Rayo confía en que la experiencia de Paco, la calidad de Luis Cembranos, la polivalencia de Azkoitia y la frescura de Roberto, que regresa después de una lesión, sirvan a su equipo para salir de la crisis.

Josu Uribe, por su parte, medita alinear una defensa con tres centrales, aunque podría dar mayor profundidad a las bandas con la inclusión de Uranga en una de ellas. Ahí radica la duda del preparador del Getafe: situar a Pachón como acompañante de Craioveanu o asegurar defensivamente dando entrada a Bernaus en la banda izquierda.