Mengual y Tirados apuntan a la plata

Ha sido una de sus mejores actuaciones en cuanto a la ejecución de las coreografías”, con estas palabras resumía satisfecha Anna Tarrés, seleccionadora nacional de sincronizada, la actuación de Gemma Mengual y Paola Tirados en las pruebas preliminares de dúo. Ayer todo fue sobre ruedas para las aspiraciones de las españolas. Hasta el tiempo acompañó. El sol calentó a ratos y eso lo agradecieron tanto las participantes como el público asistente.

Por la mañana, sin embargo, las rusas, las titulares — no actúo la junior de la prueba de solo—, mostraron enseguida su superioridad. La pareja formada por las dos Anastasias, Davydova y Ermakova, salieron las sextas en la rutina libre y arrancaron hasta dos dieces a los jueces en la expresión artística. Por algo son las campeonas del mundo.

Gemma y Paola, pese a cometer un pequeño fallo al final de la rutina libre, se alzaron hasta el segundo puesto. Por la tarde, en la rutina técnica, las rusas siguieron en su línea. Y las españolas explotaron. Motivadas por el estreno de la nueva coreografía del ejercicio técnico, que será la misma que lleven a los Juegos de Atenas, las españolas mejoraron su actuación. Al ritmo de los acordes de la música de Zorba El Griego, las españolas se afi anzaron en el segundo puesto. Terceras fueron las integrantes del dúo francés formado por Virginie Dedieu y Laure Thibaud.

Lograr la medalla de plata el domingo en el dúo está muy al alcance de las españolas, según lo que se vio ayer en las piscinas del Mundial-86. Hoy le toca el turno al equipo, que acude a este Europeo motivadísimo tras lograr hace dos semanas en el preolímpico, por vez primera en su historia, la participación en unos Juegos Olímpicos.

Arte dentro y fuera del agua

Ver a las chicas de la natación sincronizada causa sobre todo mucha admiración. Porque si llevar a cabo semejantes acrobacias en el agua resulta ya difícil de imaginar para cualquier humilde mortal, hacerlo en perfecta armonía y sincronización se antoja prácticamente imposible. Y además cuenta todo: puntúa la ejecución técnica, la expresión artística, la música, la originalidad de las coreografías, los bañadores... En pocas palabras, se trata de cerca de tres minutos en los que hay mucho que ver y admirar.