Entrevista Sergio
"El Oporto tiene menos solera, pero es rocoso"
Es uno de los fijos en el once del Deportivo. Sergio González (Barcelona, 10-11-76) está viviendo el momento más dulce de su carrera futbolística en A Coruña. Afirma sentirse "orgulloso de haber participado en lo de Milán" y haber aprendido "de aquella derrota en Mónaco". El mediocentro advierte que los portugueses tienen menos nombre, pero darán más trabajo.
A bote pronto, ¿a qué le suena la Copa de Europa?
Para mí la Copa de Europa es el gol de Koeman a la Sampdoria, yo tenía entonces 15 años; el repaso del Milán al Barcelona en Atenas o el tanto de Mijatovic en la Séptima...
¿Pensaba usted en llegar hasta semifinales cuando empezó esto en pleno agosto?
Nunca se habló de un objetivo concreto, pero es evidente que todos mirábamos de reojo a los cuartos de final porque era el tope del equipo.
Irureta afirma que la previa fue un trago complicado por la presión que conlleva.
La previa es una reválida en la que te juegas los méritos de toda una temporada anterior en 180 minutos. No sé si es justo o no, pero está montado así. Es algo cruel, pero por suerte pasamos.
Después de superar el grupo con más problemas de los esperados, llegan las eliminatorias a doble partido.
Las eliminatorias ante la Juventus y el Milán han evidenciado la madurez de este equipo. Ahora sabemos manejar los tiempos del partido y los de la eliminatoria.
¿Qué destacaría de lo que ha vivido hasta ahora en esta edición de la Champions?
Entre lo más positivo destacaría la actitud entusiasta del equipo ante el Milán y, sobre todo, en Rosenborg. Allí jugamos con poco trabajo acumulado en las piernas. Por supuesto, entre los borrones están el partido de Mónaco y creo que el resultado de la ida de Milán. El Deportivo no mereció tanto castigo en San Siro, porque jugó mejor de lo que reflejaba al final del encuentro el tanteador.
¿Es consciente de que participó en un partido histórico ante el Milán?
Es imborrable. Nos tocó vivirlo y fue un orgullo. En el descanso pensamos: si nos ponemos a especular ante el Milán ahora, nos suicidamos. Hicimos historia, como en Mónaco, pero al revés. Esta temporada hemos hecho historia en lo positivo y en lo negativo.
¿Aprendió algo de aquello?
De Mónaco, como de todos los grandes golpes, es de donde más se aprende. Pero con cuatro o cinco goles habría bastado, ocho fueron demasiado castigo. Posteriormente, el equipo vivió un periodo de reflexión y digerimos aquello.
Del Oporto, ¿qué me dice?
El Oporto tiene menos solera que Milán o Juve, pero está más trabajado, es rocoso. En la ida su presión fue asfixiante.
¿Algún nombre propio?
Giuly, Rothen y Pancaro, que me hizo trabajar de lo lindo la noche de San Siro.