El gerundense Tommy Robredo, número 22 del ranking mundial, y el argentino Gastón Gaudio, número 35, serán hoy los protagonistas de la segunda final hispano-argentina en los ya más de cincuenta años de historia del Open SEAT Godó de Barcelona. Una final que se presenta equilibrada, dura y siendo uno de ellos, Gaudio, el mismo que en la final del 2002 barrió de la pista central a Albert Costa.
Robredo, que ayer cumplía 22 años, jugó un gran partido contra el belga de 21 años Kristoff Vliegen, la revelación del torneo, al que venció por 6-4 y 6-3. Un claro 4-1 para Robredo, que sólo permitió a Vliegen dos puntos en los tres primeros juegos y rompiéndole ya el servicio en el segundo, hizo pensar en una rápida victoria del español. Pero se lo tuvo que currar.
Montañés, KO. Por su parte, Gaudio acabó con las esperanzas de Albert Montañés también en dos sets por 6-3 y 6-4 y, sin duda alguna, fue superior al tarraconense. Le rompió el servicio por dos veces en el primer set (6-3) y salió demoledor en el segundo, llegando a un rotundo 5-2, después de que Montañés le rompiese el servicio en el primer juego y se colocase 2-0. Así que Robredo versus Gaudio. Los dos tienen hambre de títulos. Gaudio no ha logrado una victoria desde el Abierto de Mallorca, en mayo del 2002, y Robredo no lo hace desde el 2001 en que derrotó a Albert Portas en la final de Sopot (Polonia).
En su debut como pareja de hecho en el circuito ATP, Fernando Verdasco y Feliciano López, los dos jugadores más explosivos del momento, impresionaron en el Godó. Cayeron en semifinales ante los argentinos Mariano Hood y Sebastián Prieto, pero fue una gozada verlos evolucionar sobre la pista central del RCT Barcelona. A este paso el G-3 va tener más problemas para descartar parejas para el doble de la Davis.
