NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Golf | Masters de Augusta

El zurdo Mickelson se puso la chaqueta

Un putt magistral en el 18 le dio la victoria y evitó un desempate con Ernie Els. Sergio García firmó la mejor vuelta (66) y acabó 4º

<b>IMPERIAL.</b> Sergio García realizó una exhibición sin premio fi nal.
AFP

El Masters de Augusta hizo ayer un giro a la izquierda casi definitivo con el segundo triunfo consecutivo de un jugador zurdo. Si el año pasado fue el canadiense Mike Weir, esta vez le tocó el turno a un auténtico Poulidor del golf llamado Phil Mickelson. El estadounidense, que salió líder al campo en la cuarta y última vuelta del torneo, embocó un putt decisivo de cuatro metros en el hoyo 18 para evitar un desempate con Ernie Els, otro grande que durante muchos hoyos se vio campeón.

El mejor. Sin embargo, hubo otro gran protagonista en Georgia: Sergio García, que estuvo a punto de meterse en la lucha por el título. Sacó el genio que lleva dentro y firmó un 66 (incluyendo un eagle, siete birdies, un bogey y un doble bogey) para un total de 285, tres golpes menos del par del campo. Su tarjeta fue la mejor de todo el torneo. Lástima que el español no había estado fino el sábado, en esa tercera vuelta que acostumbra a ser vital para encarar con opciones el último recorrido. Si en lugar de firmar un 75 hubiese vuelto a hacer el par, como en las dos primeras jornadas, su vueltón de ayer le habría podido proporcionar esa chaqueta verde con la que sueña cualquier golfista. El mayor mérito es que comenzó su irresistible ascensión después de pagar un doble bogey en el hoyo 6, un par 3. Eso habría llevado al desánimo a cualquiera, pero ocurrió lo contrario con él. Engarzó seguidamente tres birdies consecutivos y, tras dos pares de transición (el 10 y el 11), volvió a coleccionar un par de birdies antes de ceder un bogey en el 14.

Otra vez espoleado por el error, fue a más con un final de recorrido espectacular: birdie-birdie-birdie-par. Y eso que el último 4 en su tarjeta no fue otro birdie porque su putt, desde unos 12 metros y en bajada, se quedó a una pulgada del objetivo.

Por su parte, Chema Olazábal acabó su viacrucis con un 75 para un total de 294 goles.