Protagonista esperado

Pandiani comenzó la temporada marcando en seis partidos consecutivos y se colocó como líder en la lucha por el pichichi. Todo eran parabienes para el uruguayo, que había regresado en verano a A Coruña después de un periodo exitoso en Mallorca, pero después todo se volvió oscuridad. El gol se alejó del uruguayo, los focos volvieron a colocarse encima de Tristán y la mayoría maldecía la marcha de Makaay a Múnich. Walter, demasiado acostumbrado a que el protagonismo sea para otros, siguió trabajando. Pero si algo tiene el delantero es fe, como la noche del París Saint Germain, en la que el Depor perdía por 0-3 en Riazor y tras calentar 25 minutos en la banda, le dijo a Scaloni : "Si me saca, meto tres goles". Y así se gestó su primera noche de fama en el fútbol español.

Y es que Pandiani tiene una fórmula: "Correr el doble, empujar el doble y meterle la cabeza a todo lo que sea". Cuando no eres una estrella mediática y perteneces a la clase media del fútbol, hay que currárselo el doble para salir en los resúmenes de televisión de los partidos. Anoche, en otro acto de fe, de fogosidad, los focos se encendieron para Pandiani. Quizá la noche y el escenario estaba para otros, pero Walter les ganó el protagonismo. Cuando Diego Martín Dorta, de Peñarol, le bautizó como ‘El Rifle’, no pudo ser más certero.