Argentina no tiene a Diego, pero sí más variantes ofensivas

Chile amenaza en serio con llevarse una de las dos plazas olímpicas, y por eso el Brasil-Argentina de anoche sonaba a decisivo. De un lado, Brasil, con Diego para desequilibrar, Daniel Carvalho y Robinho por delante y Marcel, una réplica de Jardel, de nueve puro. Ricardo Gomes arrancó el torneo sin delantero centro, con Robinho más adelantado y la sensación de que el talento resolvería. Marcel es típico nueve de área que tan pocas veces le rindió a Brasil, y basta con recordar a Serginho en el 82 o Careca en el 86. Genios como Ronaldo aparte, le funcionaron siempre mejor delanteros hábiles como Romario o Bebeto. Argentina es distinta, y no deja de ser irónico. Bielsa no tiene nueve puro y juega con una delantera Tévez-César Delgado. De su movilidad se aprovechan Ferreyra o Lucho González. Los dos llevan un Preolímpico espectacular, y Brasil les teme. En realidad los brasileños afrontan el partido con más temor, pese a la victoria en las semifi nales del Sub-20. Dudu por Paulo Almeyda para darle más fuerza al medio campo y el volante derecho Elano al banquillo. Brasil tiene más miedo, y también menos movilidad en ataque. Sin dar un pronóstico, me parece difícil que pierda Argentina. No tiene un jugador como Diego, pero sí más variantes ofensivas.