Una pareja ilusionante
Decíamos ayer que España tiene un importante hándicap, un punto débil, a la hora de intentar reconquistar la Copa Davis: el doble. Contamos con un equipo casi perfecto (pocos países cuentan en su nómina con jugadores de la talla de Ferrero, Moyá más la segunda línea emergente) pero ninguno siente un especial interés por el partido de parejas. El dúo Costa-Corretja parece periclitado, por eso hacen falta soluciones inmediatas y hasta arriesgadas, porque España visitará a la República Checa el próximo 6 de febrero. El experimento con Feliciano López y Corretja en Australia no funcionó y aunque no sería bueno olvidarnos del toledano para el futuro inmediato, desde la India podría venir una solución.
Allí están, en Madrás, jugando en dobles Rafael Nadal y Tommy Robredo y de momento han ganado los dos primeros partidos ante rivales menores. Pero todo es comenzar. Es una apuesta de futuro, con cierta coherencia. El mallorquín es zurdo y el catalán diestro, con lo cual ocupan de forma natural todos los espacios de la cancha. Tienen cierta alergia a la volea, pero eso se puede mejorar. Si ambos armonizaran sus calendarios deberían seguir como pareja de dobles. Eso para Robredo será mejor que seguir con el carrusel de compañeros de la temporada pasada, en la que que llegó a jugar con diez tenistas distintos. Con Nadal puede tener un futuro apañado en la Davis.