Esto no es un premio

Tengo que reconocer que me gusta la forma de manejar la plantilla de Queiroz. Pero las famosas rotaciones nunca las acabé de entender, ni los cambios diplomáticos. Del Bosque tuvo desigual fortuna con ellos. El nuevo técnico no se anda con medias tintas. En la Copa han jugado los titulares, salvo algún retoque. En cuanto ha llegado la eliminatoria a doble partido y el rival sigue siendo inferior, Queiroz se lleva al equipo B. Sabe que hay revancha en una semana. El único pero que se le puede poner es la sensación de estafa en los aficionados del Éibar. Posiblemente ha influido también el bajón físico ante el Murcia. Fue un toque de atención. Se notaba saturación de partidos y desidia ante un equipo inferior.

En Éibar se hubiera multiplicado esa sensación. Pero que nadie se engañe, lo de hoy no es un premio a la cantera, es simplemente una oportunidad pintiparada para dar descanso a los titulares por la generosidad del sorteo y la cabezonería federativa a lo hora de no alargar lo de la eliminatoria única hasta la final. El valor de la cantera no se ha de juzgar por este casual partido de Copa del Rey, sino por la fortaleza de la misma cuando haya que cubrir un hueco por lesión. Ni siquiera, viendo el planteamiento de Carlos Queiroz, sirve para los minutos de la basura en la Liga o la Champions League. Allí siempre juegan los titulares de principio a fin. Y si no, Solari y Guti como mucho.