Lopo: "Será bueno el regreso de Toni"

Alberto Lopo está contento. Por muchos entrenadores que pasen, siempre acaba siendo titular, menos cuando las lesiones no le respetan. Es joven, pero en el vestuario lo ven como un veterano. Ha tenido la responsabilidad de aconsejar a Dani Jarque o Carlos García, y él se siente orgulloso de ello. "Yo fui un privilegiado, pues a mi lado tuve a Nando Muñoz o Mauricio Pochettino", asegura. Con la llegada de Luis Fernández, da la impresión que esta temporada podrá estrenar un nuevo compañero de baile: Toni Soldevilla.

El central está plenamente recuperado de su lesión de rodilla. Lopo cree que con su regreso al equipo ciertas cosas pueden mejorar, pero asegura que el mal momento que atraviesa el equipo se debe a la falta de resultados (eso parece claro), al destino del sorteo del calendario (el Espanyol siempre coge al rival que suelta el Madrid) y a la plaga de lesiones que han padecido. "Es bueno que regrese Soldevilla al equipo. Pero también lo es que lo hagan Iván de la Peña y Raúl Tamudo. Ganamos enteros en todas la líneas. Y si el equipo tenía calidad, añadirle un poco más siempre es mejor para el juego del bloque", explica Lopo, que esta semana jugó en Madrid el partido contra las drogas.

El central, que estuvo muy cerca de firmar por el Valencia a principios de esta temporada, entiende el desencanto de la grada. Comprende que la gente se queje, aunque está convencido de que la situación dará un giro de aquí a final de temporada. "No se crea. A mí también me cuesta dormir por las noches. Tal y como comenzamos la Liga, es normal que la gente está decepcionada y que digan que tenemos que ganar una Liga de cuatro equipos. Ese es el primer objetivo. Luego, según como vayas las cosas, ya se verá", aseguró el central, que descansa tras la estadía en Peralada.

Una de las cosas que más valora Alberto Lopo de su nuevo técnico, Luis Fernández, es que no para de enseñarles cosas. Asegura, sin querer entrar a valorar los métodos del anterior inquilino del banquillo perico, Javier Clemente, que los del francés son completamente diferentes. Después de cada sesión, el equipo aprende cosas nuevas. "A nuestro nuevo técnico le gusta tener el balón, tocarlo constantemente y ver que vas de atrás para adelante con una buena transición", explica convencido de que el equipo podrá dar la vuelta a la tortilla y escapar de las posiciones complicadas en la que se ha metido. Ante el Sevilla sabe que se juega mucho, pero él seguirá dándolo todo por el bien del club.