Golazo a lo Van Basten

¡Qué golazo! Lo mete Raúl y nos empapelan las paredes de Madrid con él durante una semana. El Niño volvió a recordar al mejor Van Basten. Todo empezó en Jorge. En cuanto el canario recibió el balón, el Niño se desmarcó y echó a correr recto hacia la portería de Contreras, Jorge le vio y se la puso suavita, con cadencia canaria. Torres la empalmó sin dejarla caer. ¡Booom! Al ángulo. Ahí queda eso. Quien sepa hacerlo mejor que lo demuestre. Este chico vale más cada día que pasa y es una mina de oro para el Atlético y para el fútbol español. Sáez, majo, ahí tenemos delantero centro para muchos años. Torres se ha desatado en las últimas semanas después de una sequía goleadora que parecía desesperarle. De la crisis ha salido fortalecido. Es un genio que crece cada jornada. Y que no se arruga nunca. Y tira los penaltis aunque un fallo con la selección hizo que muchos le negaran el pan y la sal. Si querían penaltis, ahí tienen: ya lleva tres de tres en esta Liga.

El Atlético, como el Niño, juega cada día mejor. Y no es sólo Torres. Jorge parece un segundo Valerón, otro mago del fútbol. Lequi es un coloso atrás. A Sergi, un veterano de mil guerras, habría que hacerle un capítulo especial. Ayer hizo desaparecer a un crack como Joaquín. Y De los Santos es un jabato en el centro del campo. Y Gaspar aburrió a Denilson, y no al revés. A mí este Atlético me inspira confianza. Manzano, con su librillo de psicólogo y sus buenas palabras, les ha cambiado el ánimo. Se lo creen, se sienten capaces de codearse con los grandes. Se respira alegría y no desesperación. El Niño es feliz y con él ha vuelto la ilusión. Y a su alrededor crece un equipo sólido. Esta temporada sí puede ser una fiesta.