Prietas las filas

No hay síntomas de cambio en el Espanyol. Pese a que la situación es más que preocupante, nadie en el entorno del equipo parece decidido a dar un golpe de timón para reconducir la situación. Seguramente, en otra época, la decisión de poner de patitas en la calle al entrenador ya se habría llevado a cabo, pero ahora no. La calma es tensa, pero no de deja de ser calma, así que se podrán afrontar los próximos partidos con cierta tranquilidad.

El primero que lo demostró fue Joan Collet. El portavoz del Consejo, que desde la semana pasada forma parte de la comisión deportiva, lo tiene muy claro: "Tras perder con el Málaga, difícilmente las cosas iban a mejorar en Madrid y Valencia, donde jugamos contra dos de los grandes de la Liga. Creemos que en estos momentos debemos esperar y dar confianza al vestuario". Con esas palabras, Collet reforzó la teoría del presidente Daniel Sánchez Llibre el domingo, una vez que finalizó el encuentro de Mestalla.

Por su parte, ayer el equipo tuvo terapia. Estaban citados para la sesión preparatoria a las 10:30 de la mañana, pero hasta que no pasó un cuarto de hora de las once, ningún miembro del equipo salió al terreno de juego de Montjuïc. La charla fue larga. Un monólogo de Javier Clemente en el que intentó alentar a sus jugadores. Consciente de que le puede ir el puesto de trabajo, el técnico pidió a sus jugadores compromiso. Los intentó motivar. Y parece que lo consiguió. Todos salieron a entrenarse con la seguridad de que el Celta será la primera víctima del Espanyol esta temporada, el próximo domingo.

Ante la fuerte marejada, parece que hay unión. ¿Sincera? Bueno, más que nada, necesaria. El grupo quiere coger aire y, sobre todo, dar un giro a una situación insostenible. Nadie teme a la grada. Saben que ahora, en estos momentos tan complicados, la unión más que una necesidad es una exigencia. Habrá que esperar.

Toni: "Es cosa nuestra"

El portero titular en Mestalla y uno de los pesos pesados del vestuario, Toni Jiménez, eludió acusar como culpable a Javier Clemente de la situación y otorgó toda la responsabilidad a la plantilla blanquiazul: "Este equipo no está en disposición de descender. Hay que hacer cambios, pero la salida a esta situación está en el vestuario. Nosotros somos la solución. Es cosa nuestra".

Lopo dice que "sufre"

Alberto Lopo, que fue el más veterano de la defensa blanquiazul en Valencia (pese a tener 23 años), expresó ayer ante los medios de comunicación su mal sabor de boca por el momento que atraviesa el Espanyol: "Si disfrutara yendo como van las cosas, sería masoca. Nos fuimos con 3-0 al descanso y eso no es un motivo de gozo. Se sufre, lógicamente. Sólo piensas en sacar esta situación rápido hacia adelante".

Suena Luis Fernández

Uno de los nombres que suenan en Montjuïc en el caso de que prescindan de Javier Clemente es Luis Fernández. El ex técnico del Athletic no sólo es santo de la devoción de algún directivo blanquiazul, sino que también gusta en Vigo. El Celta, próximo rival perico, piensa en él como sustituto de Lotina.